Khloé Kardashian ha hablado abiertamente sobre su viaje de pérdida de peso y cómo las percepciones externas han influido en su autoestima. En una entrevista reciente con Bustle, publicada el 3 de diciembre, la estrella de reality show reflexionó sobre los desafíos y aprendizajes a lo largo de los años, además de bromear sobre cómo hubiera deseado que medicamentos como Ozempic existieran cuando comenzó su transformación.
“Durante los últimos tres años, la gente dice, ‘Debes haberte operado porque perdiste peso de repente’. Yo digo, ‘¡Ha sido un viaje de 10 años! ¿De qué hablan?’”, comentó Kardashian, de 40 años. Aunque rechaza las acusaciones de procedimientos quirúrgicos, también defiende la elección de quienes recurren a opciones como Ozempic. “Mientras las personas se sientan bien consigo mismas, ¿quién soy yo para juzgar?”, afirmó, calificando como “ridículo” el juicio hacia quienes optan por estos métodos.
El camino de Kardashian hacia la salud y el bienestar comenzó tras su separación de Lamar Odom. Aunque inicialmente acudió a terapia, un incidente de confianza la llevó a buscar consuelo en el gimnasio. “Necesitaba un desahogo, pero ya no confiaba en nadie más. Y el lugar donde me sentía más segura era el gimnasio”, explicó.
Lo que empezó como una forma de lidiar con el estrés, eventualmente se convirtió en una transformación tanto física como mental. “Como subproducto, mi cuerpo comenzó a cambiar. Me encantaba cómo me sentía. Me encantaba ponerme a prueba y desafiarme. Y lo he estado haciendo durante más de 10 años ahora, y me encanta”, compartió.
Sin embargo, Kardashian admitió que su autoestima sigue siendo un área en la que trabaja constantemente. “Cuando era más grande, pensaba que era lo máximo en el mundo. Tenía mucha más confianza. Cuanto más en forma estoy, más insegura puedo sentirme porque soy muy dura conmigo misma”, dijo, destacando lo complejo que puede ser lidiar con las expectativas internas y externas.
Sobre los comentarios críticos que ha recibido en ambas etapas de su vida, Kardashian concluyó: “Me di cuenta de que nunca harás feliz a todo el mundo. Tengo que hacer lo que es mejor para mí”.