Durante las Vistas Públicas realizadas en la Cámara de Diputados para discutir el Proyecto de Ley de Modernización Fiscal, Enzo Bezzaro, representante de la Marcha Mundial de la Marihuana en la República Dominicana, presentó una propuesta que, aunque inusual dentro del contexto fiscal, busca transformar el enfoque de las políticas de drogas en el país.
Bezzaro subrayó la importancia de incluir sectores históricamente marginados del debate económico y propuso la regulación del cannabis y el cáñamo industrial como una oportunidad clave para diversificar las fuentes de ingreso y mejorar el bienestar social y la salud pública.
Bezzaro comenzó su intervención agradeciendo la oportunidad de participar en este espacio crucial para el futuro económico del país. Subrayó que la propuesta de reforma fiscal debería ser inclusiva y prestar atención a sectores que han sido tradicionalmente excluidos del debate económico y social. “Este es un momento crucial para el futuro económico del país”, destacó, señalando que su propuesta, aunque poco convencional en un debate fiscal, podría generar un impacto significativo en diversos aspectos de la vida nacional.
El representante de la Marcha Mundial de la Marihuana explicó que la regulación del cannabis y el cáñamo industrial podría contribuir considerablemente a la economía dominicana, creando nuevas fuentes de ingresos, reduciendo costos asociados a la criminalización de la posesión y el consumo, y promoviendo la salud pública.
Bezzaro argumentó que los países que han adoptado políticas regulatorias sobre el cannabis han visto importantes beneficios económicos. “La evidencia científica a nivel global muestra que una política regulatoria del cannabis genera importantes ingresos fiscales, reduce la violencia y garantiza los derechos fundamentales de la ciudadanía”, señaló.
Subrayó que la regulación del mercado del cannabis no solo generaría ingresos directos para el Estado, sino que también reduciría los gastos asociados a la persecución y encarcelamiento de personas por delitos menores relacionados con las drogas, como la posesión de pequeñas cantidades de cannabis.
En este sentido, Bezzaro destacó que muchos países de América Latina y el mundo han comenzado a desarrollar mercados legales de cannabis que no solo incrementan los recursos fiscales, sino que también alivian la carga del sistema judicial al reducir el número de encarcelamientos por delitos menores. En la República Dominicana, donde las políticas de drogas actuales han contribuido a un alto número de arrestos y encarcelamientos por infracciones menores, Bezzaro consideró que es necesario un cambio.
“En 2023, la Procuraduría General de la República reportó 6.235 casos de personas con fichas por simple posesión de pequeñas cantidades de cannabis”, reveló, subrayando la desproporción de estas medidas punitivas en comparación con el comportamiento que es legal en otros países.
Otro de los puntos clave de su propuesta fue la relación entre la regulación del cannabis y la reducción de la violencia relacionada con el narcotráfico. Según Bezzaro, la prohibición del cannabis ha alimentado el mercado ilegal y los problemas asociados a la violencia criminal. En cambio, una política regulatoria podría transferir el control del mercado del cannabis al Estado, reduciendo así la influencia de los grupos delictivos. “Un mercado regulado ofrece un ambiente de paz y de control, lo que se traduce en menos violencia y más seguridad pública”, señaló Bezzaro.
Cannabis medicinal: una oportunidad para la salud y la ciencia
Además de los beneficios económicos y sociales, Bezzaro habló sobre el cannabis medicinal como una oportunidad de desarrollo para la República Dominicana. Señaló que regular el uso del cannabis con fines terapéuticos podría mejorar la calidad de vida de miles de personas que sufren de condiciones médicas que podrían beneficiarse de esta planta. “La regulación del cannabis con fines terapéuticos no solo pudiera mejorar la calidad de vida de miles de pacientes, sino que también representa una oportunidad para fomentar la investigación científica y el desarrollo”, aseguró.
El potencial de investigación sobre los usos médicos del cannabis en el país podría abrir nuevas puertas en el campo de la medicina y la farmacología, posicionando a la República Dominicana como un referente en esta área emergente. Bezzaro insistió en que el desarrollo de un mercado regulado de cannabis medicinal no solo aliviaría el sufrimiento de pacientes, sino que también atraería inversión y fortalecería la economía basada en la innovación científica.
Contribuciones al debate sobre la Reforma Fiscal
En el contexto de la Reforma Fiscal que actualmente se discute en la Cámara de Diputados, Bezzaro dejó claro que la regulación del cannabis podría ser una herramienta clave para diversificar la economía dominicana, generando nuevas fuentes de ingresos que aliviarían la carga fiscal sobre los sectores tradicionales. La propuesta incluye la creación de un mercado regulado de cannabis y cáñamo industrial, lo que permitiría al país aprovechar las tendencias globales en esta industria y generar empleos en un sector que está en expansión en otras partes del mundo.
Finalmente, Bezzaro hizo un llamado al diálogo y al consenso para que estas ideas se consideren dentro de la reforma fiscal, sugiriendo que el país debe mirar más allá de las políticas tradicionales y explorar enfoques innovadores que podrían tener un impacto positivo a largo plazo. “Este es un momento para edificar consensos que permitan mantener la estabilidad y competitividad del país, al tiempo que garantizamos el respeto a los derechos humanos y mejoramos el bienestar de la sociedad”, concluyó.