En una entrevista en el programa Telematutino 11, el Dr. Roberto Santana, director de la Oficina Nacional para la Reforma Penitenciaria y ex rector de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, abordó los desafíos que enfrenta el sistema penitenciario dominicano y los planes para su transformación.
Santana propuso la creación de un Ministerio de Justicia para gestionar el sistema carcelario de la República Dominicana. Argumentó que “el perseguidor no puede ser el mismo que rehabilita” y destacó la necesidad urgente de construir 24 nuevas prisiones para mejorar las condiciones de los internos y avanzar en la reforma penitenciaria del país.
Para Santana, aunque el nuevo modelo ha incorporado programas educativos y de reinserción, persisten problemas significativos, como la sobrepoblación y la falta de recursos.
Explicó que la Oficina de Reforma Penitenciaria, creada tras el incendio en la cárcel de La Victoria, busca apoyar y estabilizar el sistema. Esta oficina, que depende de la presidencia, trabaja en coordinación con diversas instituciones, incluyendo la Suprema Corte de Justicia, para abordar la alta cantidad de reclusos preventivos y la necesidad de reformar las condiciones carcelarias.
Santana presentó un plan estratégico que abarca la mejora de las infraestructuras penitenciarias y la formación del personal. Destacó que el objetivo es culminar la reforma del sistema penitenciario en un plazo de tres años, con un enfoque integral que contemple tanto la construcción de nuevas instalaciones como la capacitación del personal.
En cuanto a las proyecciones, Santana mencionó que se están diseñando nuevas cárceles con capacidad para más de 4,000 internos, además de la mejora de las existentes. Este ambicioso plan busca no solo aliviar la sobrepoblación, sino también garantizar un entorno más humano y rehabilitador para los reclusos.
Formación y Capacitación del Personal
Santana destacó la existencia de la Escuela Nacional Penitenciaria, que fundó en 2003 y que ahora opera como un instituto de estudios superiores. Sin embargo, subrayó que muchas instituciones carcelarias tradicionales, que dependen del ejército y la policía, carecen de formación adecuada. “El objetivo es sacar las cárceles de los recintos militares y policiales”, afirmó, enfatizando la necesidad de una administración más especializada.
Propuestas para el Futuro
El Dr. Santana propuso la creación de un Ministerio de Justicia que se encargue de las cárceles, argumentando que “el perseguidor no puede ser el mismo que rehabilita”. En su análisis, mencionó que la República Dominicana necesitaría alrededor de 24 nuevas prisiones para mejorar las condiciones actuales.
En cuanto a los recursos, enfatizó que, con la voluntad política adecuada, se pueden lograr cambios significativos en un plazo de tres años. “Si me dan los recursos, en tres años arreglamos la casa”, aseguró, citando experiencias exitosas en países como Guatemala, que ha obtenido certificaciones internacionales por sus estándares penitenciarios.
Innovaciones en el Sistema
Uno de los proyectos destacados por Santana es un acuerdo con la EID para involucrar a los internos en la reforestación de cuencas hidrográficas. Este programa no solo busca la reintegración social de los reclusos, sino que también aborda problemas ambientales críticos en el país. “Planeamos involucrar a alrededor de 2,000 privados de libertad en estas iniciativas”, explicó.
Contexto Actual
Con aproximadamente 25,600 internos en el país, Santana comparó la situación de la República Dominicana con la de otras naciones, destacando que aunque la cifra es alta, se encuentra en un promedio manejable en comparación con otros países. Sin embargo, reconoció que aún hay problemas serios en las cárceles no reformadas, donde persisten actividades delictivas como el narcotráfico.
A pesar de los avances propuestos, Santana advirtió que la reforma penitenciaria no es un proceso instantáneo. “No podemos cambiar 20 prisiones a la vez; se requiere un enfoque gradual”, indicó. También subrayó la importancia de aprender de las experiencias pasadas para evitar errores en el futuro.
Finalmente, se refirió a la situación de la cárcel de La Victoria, señalando que, aunque se cerrará, se trabajará en la readecuación de la infraestructura existente para mejorar las condiciones de los internos.
La conversación con el Dr. Roberto Santana dejó claro que, aunque hay desafíos significativos por delante, también existen oportunidades para transformar el sistema penitenciario en la República Dominicana hacia un modelo más humano y efectivo.
