Director de Inabie promete suplir alimentos y útiles escolares a estudiantes enviado a colegios por falta de cupos

Director de Inabie promete suplir alimentos y útiles escolares a estudiantes enviado a colegios por falta de cupos

El director del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil, Inabie, aseguró que esa institución tiene capacidad para suplir de utilerías escolares y alimentación a los estudiantes que, por razones de espacio, el Ministerio de Educación envió a colegios privados para que no pierdan el año escolar.

Víctor Castro sostuvo que lo primero es garantizar que esos niños reciban el pan de la enseñanza, porque el mal mayor es que se queden fuera de las aulas, pero las condiciones que se mantengan en ellas, con la ayuda y la inversión que hace el Estado, debe llegar a ellos.

Castro recordó que Inabie tiene capacidad para ampliar programas, y sí hay un segmento de la población estudiantil que no están dentro de las aulas de las escuelas públicas y necesitan alimentos, la institución tiene la disponibilidad para hacerlo, e igualmente se cuenta con los útiles escolares.

Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema canal 11 y TV Quisqueya para los Estados Unidos, el funcionario agregó que el gobierno entregó uniformes al cien por ciento de la población estudiantil, que pertenecen al sector público, y si tuviera que reponerse el 10% la institución que dirige cuenta con el inventario para hacerlo.

Explicó que se compró un diez por ciento adicional por la experiencia del año pasado, porque en noviembre hubo una tormenta que provocó inundaciones en gran parte del territorio nacional, específicamente en Santo Domingo Oeste donde muchas familias pobres lo perdieron todo incluyendo los uniformes escolares, y lo mismo sucedió en la provincia de San José de Ocoa, e Inabie pudo intervenir rápidamente, y les repuso los uniformes a esos niños.

“Bajo esa situación, y la condición del país en términos de fragilidad por fenómenos atmosféricas, nosotros decidimos licitar un 10% más a la población estudiantil, y tenemos inventario, o sea, que para esos niños, que fueron enviados a colegios privados por falta de cupos, pudiéramos estar hablando este lunes con el ministro de Educación para ver la posibilidad de llevar los programas hasta los estudiantes que están en esa situación, por la condición que ya se conoce”, prometió el funcionario.

Insistió que discutirá el caso con el doctor Ángel Hernández, y lo más importante es que el Inabie está en capacidad de hacerlo, porque hay los recursos disponibles y la voluntad.

“O sea, que pudiéramos estar levantando las datas para saber dónde están esos niños, y nosotros con mucho gusto pudiéramos estar respondiendo con los servicios del Instituto Nacional de Bienestar Estudiantil”, ratificó Víctor Castro.

Sostuvo que en la actualidad el gobierno está invirtiendo RD$2,000 millones de pesos mensual en el programa de alimentación escolar para más dos millones de estudiantes, a quienes se entrega más de cinco millones de raciones al día, impactando diariamente a 725 mil familias.

Llamó a no satanizar ese programa porque cuando al niño se le entregan los uniformes, útiles escolares y los alimentos, no se le pregunta credo religioso, simpatías en el béisbol, y muchos menos política, por lo que pidió ser más cuidadoso a la hora de propalar supuestas intoxicaciones con el desayuno escolar, porque casi siempre eso no guarda relación con la verdad, y el mejor ejemplo es que el pasado año no se produjo ningún tipo de evento de esa naturaleza, y en lo que va del presente, tampoco se ha producido.

Recordó que el programa, de acuerdo con varios organismos internacionales y locales, está reduciendo la pobreza monetaria en un dos por ciento del Producto Interno Bruto.

Respecto al inicio del presente año escolar, el director de Inabie dijo que el presidente Luis Abinader lo inauguró el 26 de agosto con una asistencia récord de asistencia de un 83%, y la entrega del Programa de Alimentación Escolar fue de un 95%, pero estaban listos para suplir el cien por ciento, algo que no se pudo por algunas situaciones de los suplidores.