Santo Domingo – Un estudio reciente muestra que 7 de cada 10 dominicanos tienen poca o ninguna confianza en la mayoría de las personas, reflejando un bajo nivel de confianza social en la República Dominicana.
Esta tendencia se enmarca dentro de un patrón más amplio en las sociedades latinoamericanas, donde predominan expectativas negativas sobre el comportamiento de los demás.
La cautela y la incertidumbre que caracterizan la interacción social en estos contextos dificultan el desarrollo de un sentido de pertenencia fuerte a la comunidad política, obstaculizando la creación de dinámicas cooperativas más allá de los grupos primarios. Como resultado, la coordinación de preferencias políticas individuales se agrupa principalmente alrededor de círculos familiares o partidarios, en lugar de orientarse hacia el bien común.
Este panorama de desconfianza generalizada subraya los desafíos que enfrenta la sociedad dominicana para fomentar una mayor cohesión social y cooperación comunitaria.