Santo Domingo. – Según el Anuario de Estadísticas Vitales 2023 publicado por la Oficina Nacional de Estadísticas, la edad promedio de las madres que dieron a luz en el año 2023 fue de 27.25 años, lo que representa un ligero aumento de 0.17 años en comparación con el año anterior (27.08 años). Sin embargo, se observa que todavía hubo nacimientos entre mujeres menores de 15 años, que representaron el 0.41% del total, reflejando un aumento del 0.07% respecto al año 2022 (0.34%).
El análisis por grupos de edad revela que el 75.55% de los nacimientos ocurrieron en mujeres de entre 20 y 35 años, lo que genera una cúspide elongada en la estructura de fecundidad. Los mayores porcentajes de nacimientos se registraron en los grupos quinquenales de edad de 20-24, 25-29 y 30-34 años, con el 27.35%, 27.78% y 20.42%, respectivamente. En contraste, se observa una disminución en el número de nacimientos con el incremento de la edad, siendo del 11.44% para el grupo de 35 a 44 años y menos del 1% para mujeres de 45 a 49 años.
En cuanto a las madres menores de 20 años, se registraron 18,545 nacimientos en 2023. De estos, 141 correspondieron a niñas de 9 a 13 años, 1,698 a adolescentes de 14 y 15 años, 5,777 a jóvenes de 16 y 17 años, y 10,929 a mujeres de 18 y 19 años. La edad promedio de las madres menores de 20 años fue de 17.56 años, ligeramente por debajo de la edad establecida como mayoría de edad en el país.
El informe destaca una tendencia descendente en el porcentaje de nacimientos de madres menores de 20 años, que disminuyó del 24.32% en 2011, con 43,075 nacimientos, al 11.89% en 2023, con 18,545 nacimientos. Esta tendencia refleja una reducción relativa del 56.95% en el período analizado.
Asimismo, se observa una disminución en los nacimientos de madres menores de 15 años, con un descenso del porcentaje del 1.35% en 2011 al 0.41% en 2023, lo que representa una reducción relativa del 72.93%. En 2011, se registraron 2,390 nacimientos en este grupo de edad, mientras que en 2023 la cifra se redujo a 642. Esta disminución puede deberse tanto a una reducción real como a un posible subregistro por falta de documentación adecuada.
Estas estadísticas, derivadas del Registro Civil, resaltan la importancia de continuar los esfuerzos para mejorar la documentación y el registro de nacimientos, especialmente en poblaciones vulnerables.