El aspirante a la Secretaría General del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), José Dantés Díaz, fijó su posición sobre el proyecto de Código Penal aprobado recientemente por el Senado de la República y por la Cámara de Diputados en primera lectura y que ahora irá a vistas públicas en dicha Cámara.
En este sentido, con relación al Código Penal, José Dantés rechazó categóricamente, las disposiciones aprobadas que representan serias debilidades y retrocesos en temas de suma importancia para la sociedad dominicana, como la lucha contra la violencia intrafamiliar y violencia contra la mujer, la protección de la niñez dominicana, y en el combate contra la discriminación de ciertos grupos, así como otras disposiciones nefastas que crean privilegios para estamentos de poder público, civil y militar.
“Veo con mucha preocupación la aprobación de un Código Penal que establezca penas diferenciadas en casos de agresión y violación sexual dependiendo de quién sea el agresor, como ocurre en el caso de la pena reducida a la mitad de los demás casos de violación si el autor es el cónyuge de la víctima”, expresó Dantés.
Expresó que tampoco es posible hacer causa común con un proyecto que permita la corrección violenta de los hijos en el hogar, como pretende establecer esta pieza legislativa, promoviendo así una cultura de violencia física, psicológica y/o verbal en el seno de la familia dominicana.
Dijo que es inaceptable que el proyecto de Código Penal no incluya la debida protección contra la discriminación por orientación sexual, mientras por otro lado se permite la discriminación bajo pretextos de libertad de culto o expresión.
“Causa asombro que el Partido Revolucionario Moderno (PRM), que tanto se ha ufanado por presentarse como una organización política transparente, sea precisamente quien, abusando de su mayoría mecánica legislativa, trate de eliminar la imprescriptibilidad de la corrupción, reduciendo el tiempo de su prescripción a 20 años”, añadió.
Indicó que otro hecho preocupante, lo constituye la reinstalación de las jurisdicciones militares, que da un trato especial a los cuerpos castrenses, indicando que esto es un retroceso “altamente peligroso”, además de que viola el principio de igualdad constitucional y el artículo 254 de la Constitución, concediéndoles a los uniformados un privilegio de jurisdicción sin sentido por encima del resto de la población, cuando las infracciones penales solo tienen un destino sin importar quién sea el autor: la jurisdicción penal.
La sociedad dominicana merece un Código Penal actualizado, pero justo, protector de derechos de todos los ciudadanos, no lo contrario, por lo que considero que esta pieza legislativa, de tanta importancia para el país, y que constituirá una de las herramientas para el combate de la criminalidad común y organizada, debe ser ponderada de una manera responsable, sosegada, y no aprobada al vapor. Aplaudo la decisión del presidente de la Cámara de Diputados de someter el proyecto a vistas públicas para escuchar a todos los sectores interesados y corregir los entuertos y debilidades del proyecto.