Miembros de la Asociación Farmacéutica Dominicana, denunciaron el estado de abandono en que se encuentra ese gremio que agrupa a los profesionales farmacéuticos del país. Aseguran que la actual directiva mantiene secuestrada la asociación desde el 2019 permitiendo la intrusión profesional y descuidando los intereses genuinos de los farmacéuticos en el sistema de salud nacional.
El cierre de la AFD desde 2019, ha generado una profunda preocupación en diversos sectores por la ausencia de representación y defensa de los derechos de los farmacéuticos. Esta problemática ha generado un vacío que ha facilitado la proliferación de prácticas no reguladas y ha desamparado a los profesionales que son una pieza clave en el sistema de salud.
Esta situación también ha deteriorado la calidad del servicio y ha debilitado la posición de los farmacéuticos en el ámbito salud. En ese sentido los miembros de la comunidad farmacéutica claman por una reactivación de es entidad, para que ésta vuelva a ser una voz activa y efectiva en la defensa de los intereses de sus miembros.
En varias ocasiones el intento de reactivar la institución, se ha visto empañado por una carencia total de comunicación con sus miembros, falta de realización de asambleas ordinarias y extraordinarias, ausencia de informes financieros, irregularidades en procesos eleccionarios y, sobre todo, incumplimiento manifiesto y flagrante de los estatutos de la institución, los cuales establecen elecciones cada año.
Estas deficiencias subrayan la necesidad urgente de una renovación estructural y ética de organización, que le encuentra sumida en una profunda crisis estructural y organizativa, a propósito de sus 93 años de fundación.
