Santo Domingo. Hábitat para la Humanidad República Dominicana, como institución sin fines de lucro que promueve la vivienda digna en el país, aboga por la resiliencia en las comunidades ante la temporada ciclónica.
La organización internacional con presencia en más de 70 países del mundo, resalta la importancia de la transformación de las viviendas y los asentamientos informales como medio para lograr la resiliencia en las comunidades, ante posibles incidencias durante esta temporada ciclónica.
“La mayoría de los asentamientos informales a menudo tienen infraestructuras y servicios inadecuados, lo que los hace altamente vulnerables a los impactos climáticos”, señala Cesarina Fabián, directora nacional de Hábitat para la Humanidad en República Dominicana.
En ese sentido, Fabián informa que la institución está capacitando a las comunidades en el fortalecimiento de las viviendas frente a huracanes y el empoderamiento de las mismas, a través de la metodología PASSA (Enfoque Participativo para la Sensibilización sobre Alojamiento Seguro) que busca educar a los comunitarios en prevención y mitigación de riesgo, con un proceso de toma de decisiones mancomunado.
“Reducir las vulnerabilidades y fortalecer la resiliencia comunitaria en formas de construcción es vital para el cumplimento de nuestra misión y nuestro rol en la sociedad civil en las comunidades donde trabajamos. La vivienda proporciona salud a las personas protegiéndolas contra enfermedades, apoya a las familias, a la vida comunitaria, y representa dignidad, privacidad y seguridad frente a cualquier evento, indica Cesarina Fabián, directora nacional de dicha ong.
Estas acciones forman parte de los “Lineamientos para la Respuesta a Desastres” de Hábitat para la Humanidad Internacional, sustentadas en estándares internacionales con los parámetros que establece la Norma Esfera, entre otros, que definen respuestas de asistencia con una visión de recuperación a largo plazo y desarrollo sostenible, centrándose, sobre todo, en las fases de mitigación y preparación a nivel comunitario, e incluyendo mecanismos de quejas y sugerencias como parte de las políticas institucionales.
La organización ha respondido ante eventos climáticos a través de reparaciones de viviendas y con el fortalecimiento de las familias durante el Huracán Fiona, Irma y María, entre otros.