Santo Domingo.- El Gobierno de los Estados Unidos aclara que no realiza arrestos en la República Dominicana. Así lo expresó Gabriel Hurst, portavoz de la Embajada de Estados Unidos en Santo Domingo, en respuesta a la reciente noticia sobre la deportación del empresario artístico David Jesús Jiménez, también conocido como David Cóbrate.
“Trabajamos con los organismos responsables de hacer cumplir la ley aquí en el país para colaborar en temas de interés mutuo. No puedo comentar sobre casos judiciales en curso y le remito a las autoridades dominicanas para obtener detalles sobre las investigaciones en proceso”.
Según se informó, Jiménez fue deportado hacia Estados Unidos debido a una condena que pesa sobre él desde hace siete años en Alabama, por supuesto fraude internacional de visa para comerciantes chinos y “lavado de dinero”.
En la República Dominicana, Jiménez se desempeñaba como promotor artístico de grupos populares. Según fuentes, el hombre fue detenido en el Distrito Nacional y entregado a los agentes de los Marshalls, quienes son auxiliares de la justicia estadounidense, en el aeropuerto.
De acuerdo con la información publicada en la página web del Ministerio Público de Estados Unidos, David Jesús Jiménez fue declarado culpable de conspiración para cometer fraude de visas, conspiración para cometer lavado de dinero y lavado de dinero sustancial, aprovechando su ciudadanía estadounidense.
En 2018, la oficina del fiscal federal Richard W. Moore del Distrito Sur de Alabama anunció que Jiménez fue condenado por un jurado por cargos de conspiración para cometer fraude de visas, conspiración para cometer lavado de dinero y delitos sustantivos. Según las autoridades, Jiménez aprovechó el programa de visa EB-1C, que permite a las empresas estadounidenses contratar a gerentes o ejecutivos multinacionales extranjeros para administrar sus operaciones en Estados Unidos.
Durante el juicio, se reveló que Jiménez conspiró con individuos en China que cobraron a ciudadanos chinos 300,000 dólares para adquirir un “patrocinio” de propietarios de negocios en Alabama, Florida y Mississippi. Este “patrocinio” era una solicitud fraudulenta encubierta para obtener una visa.