El Banco Mundial aprobó hoy un nuevo proyecto en la República Dominicana para ayudar a mejorar el sector eléctrico y reducir las elevadas pérdidas de distribución. A través de una inversión de US$225 millones, el proyecto ayudará a las empresas distribuidoras a reducir las elevadas pérdidas en la distribución de electricidad mediante la rehabilitación de la red de distribución, la mejora de la tecnología de gestión y la reducción de los cortes de electricidad. Se espera que 813,000 consumidores, urbanos y rurales, de los sectores residencial y comercial, se beneficien de estas mejoras.
Las pérdidas que experimenta el sector eléctrico en República Dominicana se deben principalmente a líneas de distribución de energía viejas y sobrecargadas, conexiones ilegales, problemas con los medidores y estimaciones incorrectas de facturación y consumo. Estas pérdidas promediaron 1,200 millones de dólares al año durante el período 2017-2021, lo que corresponde al 1.4 por ciento del PIB. Las importantes transferencias presupuestarias anuales a las empresas distribuidoras de electricidad para cubrir estas pérdidas cargan el gasto público. Reducir la necesidad de estas transferencias contribuirá a obtener más recursos para programas sociales y desarrollo humano.
El Proyecto de Mejora de la Eficiencia de la Distribución y Fortalecimiento del Servicio complementará los esfuerzos del gobierno de la República Dominicana para abordar esta situación. El proyecto trabajará con Edenorte, Edesur y Edeeste (EDE), las tres empresas estatales que realizan casi toda la distribución de electricidad a hogares y empresas en el país, para abordar estos desafíos ayudando a mejorar la infraestructura eléctrica y modernizar los procesos comerciales de las EDE, mejorando su sostenibilidad financiera.
“El Gobierno de la República Dominicana ha tomado medidas decisivas para comenzar a abordar los desafíos que el país ha enfrentado durante décadas en el sector eléctrico”, dijo Alexandria Valerio, representante del Banco Mundial para la República Dominicana. “El Banco Mundial seguirá apoyando estos esfuerzos para lograr una electricidad menos dependiente de carbono y más confiable, lo cual es fundamental para el crecimiento de la productividad del país, la reducción de la pobreza y el bienestar de las personas”.
Se espera que el proyecto rehabilite 1,342 kilómetros de líneas, regularice a 225,826 clientes que no pagan pero que consumen electricidad, reemplace medidores deteriorados e instale nuevos y mejore los sistemas comerciales y de gestión de datos de medición de las EDE. Esto permitirá una mejor facturación, cobranza y mayores ingresos para las EDE, minimizando las pérdidas y reduciendo la dependencia de los subsidios del gobierno. Al aliviar los transformadores sobrecargados y mejorar la infraestructura vieja se requerirá menos electricidad la cual proviene de combustibles fósiles. Esto contribuirá con la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero del país.
Este proyecto es la primera de tres inversiones del Banco Mundial para apoyar la visión del Gobierno dominicano para el desarrollo sostenible del sector eléctrico. Este programa multifase para la República Dominicana tiene un monto de financiamiento estimado de US$505 millones a lo largo de diez años con el objetivo de mejorar el acceso a un suministro eléctrico más confiable, eficiente y ambientalmente sostenible para toda la población.