Por Victor Manuel Grimaldi Céspedes
Este 25 de septiembre se han cumplido 60 (sesenta) años del golpe de Estado que derrocó en el 1963 al gobierno constitucional presidido por Juan Bosch.
La mayoría de quienes contaban entonces sus tiempos juveniles o han fallecido o recuerdan muy poco los acontecimientos sucedidos.
Quienes nacieron después de 1963 han estado leyendo o escuchando anécdotas incompletas.
Tantas versiones y confusiones desde entonces han aparecido sobre el derrocamiento del gobierno más democrático y más honesto que ha tenido el país en toda su historia.
Ése gobierno fue escogido el 20 de diciembre de 1962 en unas elecciones libres después de la desaparición de la dictadura de 31 años de Rafael Trujillo que finalizó el 30 de mayo de 1961 con su ajusticiamiento.
Qué es un Golpe de Estado
Un golpe de Estado es el derrocamiento de un Gobierno mediante el uso de las Fuerzas Armadas de un país. Éso fue lo que ocurrió la madrugada de aquel 25 de septiembre.
En el caso del golpe de Estado a Juan Bosch, el mismo Bosch dijo o lo escribió varias veces que el golpe del 25 de septiembre de 1963 NO fue programado ni planificado, si bien se creó durante semanas previas el ambiente para debilitar la autoridad del gobierno democrático.
22 Años Después: en 1985
El 25 de septiembre de 1985, y la nota de este acto apareció en Listin Diario al dia siguiente, Bosch estuvo conmigo en el acto de la puesta en circulación de mi libro “El Misterio del Golpe de 1963” celebrado en el Museo Nacional de Historia y Geografía.
Allí Juan Bosch dijo que muchos historiadores ignoraban la verdad de los acontecimientos de 1963. Entonces era yo un joven investigador de temas sociales y comenzaba a publicar libros sobre temas históricos.
Durante años me dediqué a estudiar rigurosamente los sucesos políticos que ocurrieron después de la eliminación de Rafael Trujillo el 30 de mayo de 1961. Muy especialmente he revisado muchos documentos de los sucesos de 1963 y 1965.
Si se lee la Historia de América Latina de aquellos años, se podrá notar que el Gobierno de Bosch fue derrocado en una época en que hubo otros golpes de Estado en los años del decenio 1960-1970 de la América Latina. En Argentina, en Honduras, en Ecuador, en Brasil, por ejemplo, entre tantos. Luego en 1970 en Uruguay, en Chile en 1973 y de nuevo en Argentina en 1976. Todo esto sin contar los casos de Panamá, Guatemala, El Salvador y Honduras de nuevo.
El caso del golpe dominicano de 1963 fue muy característico: Las órdenes de arrestar y deponer al presidente Bosch les fueron dadas a los jefes militares dominicanos después de una discusión que sostuvieron con él en el Palacio Nacional en la madrugada del 25 de septiembre de 1963.
El papel del asesor de la AID:
Las órdenes de arrestar a Bosch fueron dadas por el asesor policial Anthony Ruiz (que NO era Dan Mitrione, agente de la CIA (1) ejecutado en Uruguay en 1970 por los guerrilleros Tupamaros. El agente Mitrione estuvo en la República Dominicana después de 1965.
Ruiz, de origen hispanoamericano, era el Consejero de la AID (2) en materia de seguridad pública en 1963.
Estos detalles me los reveló el General de la Policía Nacional Benito Monción Leonardo, fallecido hace unos años.
En el momento que fue arrestado Bosch en el Palacio Nacional también estaba allí con Ruiz el coronel militar norteamericano Fritz Long, asesor de Defensa de la Embajada de los Estados Unidos, y esa presencia de Long ya había sido indicada por Bosch tiempo después en sus escritos que señalan al Gobierno de Estados Unidos como el responsable de haber ordenado su derrocamiento.
Lo nuevo es este dato del papel que jugó el Funcionario de la AID en el golpe de Estado de 1963.
Un Conjunto de Factores y Abril de 1965:
Un conjunto de factores se sumaron con la trama que condujo al madrugonazo del 25 de septiembre, pero lo cierto es que poco tiempo después, el 24 de Abril de 1965, un importante sector de las Fuerzas Armadas Dominicanas inició la más bella gesta librada por el Pueblo Dominicano para restablecer las libertades democráticas que puso en práctica Bosch con su ejemplar Gobierno elegido por voto libre popular el 20 de Diciembre de 1962 y juramentado el 27 de febrero de 1963.
Los Estados Unidos en 1963 no toleraban el ejercicio independiente y soberano del Poder. Con esta premisa los asesores policiales y militares norteamericanos dieron instrucciones a los Jefes Militares de la República Dominicana de derrocar a Bosch.
A Bosch se le cuestionaba su posición de neutralidad frente a los conflictos que sostenía el Gobierno Norteamericano frente a Cuba y los Paises aliados de la Rusia Soviética.
El Complot Contra el Presidente Duvalier
Al dictador presidente haitiano Francois Duvalier, que gobernaba desde 1957 en el vecino país, a partir del año 1962 los Estados Unidos también intentaban sacarlo del Poder debido a que había establecido relaciones diplomáticas con Polonia, que entonces era un país aliado de la Rusia Soviética o comunista.
Para derrocar a Duvalier desde el territorio de la República Dominicana los Estados Unidos secretamente instalaron campamentos de guerrilleros haitianos, quienes atacaban a militares haitianos de puesto en Juana Méndez en territorio de Haití.
Cruzaban la frontera desde Dajabón hacia esa ciudad haitiana desde nuestro territorio.
El presidente Bosch nunca autorizó estos campamentos y al enterarse le ordenó al Ministro de las Fuerzas Armadas Victor Elby Vinas Román que los desmantelara. Bosch explicó y escribió detalladamente sobre ese tema después de su derrocamiento.
De mi parte, investigando en los Archivos Nacionales de los Estados Unidos, obtuve documentos en los cuales se menciona que en la madrugada del 25 de septiembre de 1963 el tema del apoyo de los jefes militares diminicanos a la guerrilla anti Duvalier (sin el consentimiento del presidente Bosch) fue uno de los puntos de discusión de Bosch con los militares.
Una revelación importante la hace el que fuera entonces Embajador de los Estados Unidos en Puerto Príncipe, Ciudad capital de Haití.
La CIA en el complot contra Duvalier:
El Embajador de Estados Unidos, Raymond Thurston, testificó que la Agencia Central de Inteligencia (CIA), apoyada en estas acciones con el conocimiento expreso del presidente John F. Kennedy, daba los recursos al General haitiano exilado Leon Cantave para liderear las guerrillas que atacaban a Haití desde territorio dominicano con el fin de derrocar a Duvalier.
Todo eso se hizo sin el apoyo ni el conocimiento del presidente dominicano Juan Bosch.
La última incursión de Cantave ocurre el 22 de septiembre, y es curioso que ese día fracasa en nuestro país una “huelga” contra Bosch. La huelga era el tipo de jugada de distracción promovida por la CIA. Además, era la manera de debilitar al gobierno dominicano.
Se dijo durante cierto tiempo que el tema de discusión con los militares el 25 de septiembre era la remoción del Coronel Elias Wessin y Wessin. No fue el único asunto. Claro, al llegar este punto de discusión cerrada Bosch intentó de realizar una maniobra política.
Wessin y Wessin No dio golpe de Estado:
Juan Bosch aclaró muchas veces que el golpe de Estado no lo dio el coronel Wessin y Wessin. Simplemente le pedía a los jefes militares que lo trasladaran a otra posición diferente a la que ocupaba en la brigada adyacente a la base aérea de San Isidro
Juan Bosch me lo contó a mi de esta manera: ‘Victor Les dije a los jefes militares que si yo como presidente no podía remover al Coronel Wessin de la dirección del Centro de Enseñanza de las Fuerzas Armadas (CEFA), entonces mejor presentaba renuncia como Presidente de la República. Cuando dije que haría lo que establecía la Constitución, presentar la renuncia personalmente ante las Cámaras Legislativas reunidas en Asamblea Nacional, fui hecho preso”.
Bosch me explicó que en realidad su propósito era que al ser convocados los legisladores para conocer de su renuncia, se produjera un movimiento de masas a favor del Gobierno en las calles del país.
Precisamente por eso se ejecutó la orden del golpe de Estado del 25 de septiembre de 1963. La Embajada de Ruiz y Long temió el escándalo internacional que podría haberse producido si Bosch descubría y denunciaba que era objeto de un plan siniestro para ponerlo en ridículo con los campamentos secretos de guerrilleros haitianos.
La orden de derrocar a Bosch:
En octubre de 2007, cuando el General Monción Leonardo me reveló el nombre de quien fue que dio la orden final de hacer preso a Juan Bosch: el asesor de la AID de la Embajada Norteamericana Señor Ruiz, pude terminar de componer la historia de la trama que se llevó el Gobierno más honesto que ha tenido el Pueblo Dominicano en toda su historia.