SANTO DOMINGO.- Las autoridades de la República Dominicana y los funcionarios de Haití, culminaron este jueves la segunda reunión prevista para tratar el conflicto que existe entre ambas naciones por la construcción de un canal para desviar agua del río Masacre, luego de permanecer reunidos a puertas cerradas.
La reunión culminó sin que ningunas de las autoridades presentes dieran detalles a los medios de comunicación.
Sin embargo, el Ministerio de Relaciones Exteriores emitió un comunicado sobre la posición del Gobierno dominicano sobre la construcción de un canal en el lado haitiano del río Masacre o Dajabón.
En virtud de la falta de información adecuada y precisa sobre la posición del Gobierno dominicano respecto a la construcción de un canal en el lado haitiano del río Dajabón o Masacre, el Ministerio de Relaciones Exteriores considera pertinente publicar una cronología que evidencia el planteamiento de dicha posición por canales diplomáticos y medios de comunicación.
El 27 de abril de 2021, cuando este Ministerio de Relaciones Exteriores se enteró de la construcción de un canal en el río Dajabón o Masacre, envió una nota diplomática al gobierno haitiano exigiendo “detener de manera inmediata cualquier trabajo u obra que pudiera afectar el cauce natural del río Masacre”. La nota hizo referencia a lo establecido en el artículo 10 del Tratado de Paz y Amistad Perpetua y Arbitraje de 1929. A raíz de esa nota se convino una reunión técnica de la Comisión Mixta Bilateral Dominico-Haitiana que se celebró el 27 de mayo de 2021.
En sus palabras de apertura de dicha reunión, el ministro Roberto Álvarez manifestó: “…la expectativa del Gobierno dominicano es que no se reiniciarán los trabajo en los canales de riego”. Al final de dicha reunión, los técnicos de la Comisión acordaron: “Seguir compartiendo informaciones relativas a todas las obras en materia hídrica realizadas y a realizarse en la zona fronteriza” y crear una mesa técnica para mejor entendimiento de los trabajos realizados en la zona fronteriza.
El 31 de mayo de 2021, al recibir información de que la parte haitiana no había detenido los trabajos del canal, ni había sido transparente con las intenciones reales de la obra, el ministro de Relaciones Exteriores, Roberto Álvarez, realizó una declaración desde el Palacio Nacional, anunciando que el Gobierno dominicano no regresaría al diálogo con Haití sobre la construcción del canal sobre el río Dajabón/Masacre, hasta que esa nación no declarare públicamente que había paralizado la obra.
El 18 de junio de 2021 el ministro de Relaciones Exteriores de Haití envió una nota a su homólogo dominicano en la que pedía retomar el diálogo y defendía la posición haitiana. El 6 de julio de 2021, el canciller dominicano respondió a su homólogo haitiano reiterando de manera enfática y con argumentos jurídicos y técnicos, que el Gobierno haitiano debía detener inmediatamente la construcción del canal y lo exhortaba a abrir un diálogo con el objeto de explorar el aprovechamiento de recursos hídricos alternativos. Dicha comunicación incluyó, además, lo siguiente:
- El Gobierno dominicano nunca fue notificado oficialmente de la construcción de un canal cuya intención era la de conectarlo al río Dajabón/Masacre.
- Un documento que fue entregado informalmente por un funcionario haitiano durante la reunión de la comisión técnica el 27 de mayo de 2021, contentivo de algunos aspectos técnicos de la obra, permitió ver que hubo falta de transparencia de la parte haitiana sobre la intención y características de la obra iniciada unilateralmente en 2018.
- No se trataba de un canal de riego como se había informado a la Comisión Mixta Bilateral, sino de un canal de trasvase, lo cual viola el derecho internacional y el Tratado de Paz y Amistad Perpetua y Arbitraje de 1929, que prohíbe obras que cambien la corriente del río sin acuerdo previo.
- A pesar de la exigua documentación, se pudo concluir que la altura del canal era superior en al menos 2.5 metros al nivel del río, lo que requeriría la construcción de un dique derivador que aumentaría el riesgo de inundaciones en la frontera entre ambos países.
- La construcción del canal podría afectar el caudal del río en la zona baja, perjudicando unas 14 mil tareas de terreno cultivable en territorio dominicano y a unas 10 mil tareas en territorio haitiano que benefician a 266 agricultores dominicanos y 125 agricultores haitianos de un lado y otro de la frontera.
- También podría causar un daño ecológico al vital ecosistema lacustre de agua dulce de Laguna Saladilla, uno de los humedales más importantes en República Dominicana.
- Se desconocía quiénes eran los principales beneficiarios del proyecto y quién lo financiaba.
- La obra viola también el principio de uso equitativo de las aguas transfronterizas, el principio de precaución ambiental y el equilibrio de intereses, por su carácter unilateral.
- La posición del Gobierno dominicano siempre ha sido que el Gobierno haitiano debe detener inmediatamente la construcción del canal y abrir un diálogo con el objetivo de explorar alternativas para la gestión de los recursos hídricos que beneficien a ambas naciones.
Después del asesinato del presidente Jovenel Moïse, los trabajos en el canal aparentemente cesaron. Al enterarnos del reinicio de los trabajos para conectar el canal al río Dajabón/Masacre, el presidente de la República, convocó al Consejo de Seguridad Nacional, el cual emitió un comunicado el 12 de septiembre de este 2023 con las medidas tomadas por el Gobierno dominicano y reiterando la misma posición fijada en 2021: que la construcción del canal debe cesar de manera inmediata. Dicha posición se mantiene invariable.