En el marco de la investigación en curso sobre la explosión que sacudió a San Cristóbal el pasado 14 de agosto, las autoridades han descubierto detalles relacionados con el almacenamiento de sustancias químicas en el lugar del incidente.
Tras la rápida actuación de los bomberos para sofocar el incendio resultante de la explosión, se logró recuperar 10 cajas de LUPOROX A 70S (Peróxido Orgánico 5.2) del local siniestrado. Sin embargo, algunas de estas cajas quedaron dentro del mezzanine ubicado en el interior del edificio.
El propietario de Vidal Plast SRL, Edward Armando Vidal Garrido, se presentó en el lugar después del incidente y expresó su intención de hacerse cargo de las cajas de Peróxido Orgánico, tanto las que estaban en el interior del local como las recuperadas por los bomberos. En ese momento, el Coronel C.B. Eugenio Ceranthony Peñaló advirtió al imputado sobre los peligros de exponer este material a altas temperaturas y señaló que el lugar no era adecuado para su almacenamiento, instándolo a retirarlas de inmediato.
La investigación llevada a cabo por el Ministerio Público ha revelado que Vidal Plast S.R.L., bajo la dirección de Edward Armando Vidal Garrido, tenía el control y dominio del mezzanine donde se encontraban un número indeterminado de cajas de LUPOROX A 70S (Peróxido Orgánico 5.2) durante más de dos años.
Estas cajas se encontraban almacenadas sin seguir los estándares adecuados de seguridad y ventilación requeridos para sustancias químicas de esta naturaleza.
Las autoridades continúan recopilando pruebas y testimonios en relación con este caso para determinar posibles responsabilidades y garantizar que se tomen las medidas adecuadas para evitar incidentes similares en el futuro.
El incidente ha resaltado la importancia de mantener estándares estrictos en el almacenamiento de productos químicos peligrosos y la necesidad de que las empresas cumplan con las regulaciones de seguridad correspondientes.