El vocero del Bloque de Senadores del Partido Revolucionario Moderno (PRD), Iván Silva, manifestó este miércoles su rechazo al proyecto de modificación las leyes 4532 y 4833 de los años 1956 y 1958 respectivamente, con el propósito de darle visibilidad a la posibilidad de que gobiernos, empresas y personalidades extranjeras puedan explorar, explotar y beneficiarse de los yacimientos petroleros, sus derivados y demás hidrocarburos, como: asfalto, nafta, betún, brea y otras sustancias análogas.
El doctor Silva, quien fue electo senador por La Romana en la boleta del partido oficialista, al cual perteneció hasta hace unos días, aseguró que el presidente Luis Abinader pide esas modificaciones a esas leyes, “bajo la coartada de atraer inversión extranjera, dentro de sus aventuras de la política internacional, facilitar la llegada de capitales frescos, desde el exterior, unas presunciones que, desde el mismo 16
de agosto de 2020, fueron pregonadas en su discurso de toma de posesión sin que, hasta la fecha, se conozca la primera iniciativa con resultados tangibles”.
“Recordamos los pactos en materia de combustibles, en materia de hidrocarburos con el presidente Abinader, durante su visitas a la República de Argentina, los acuerdos con el presidente Iván Duque, de Colombia que, mientras los generadores privados compraban el carbón a US$108 dólares la tonelada, Punta Catalina compraba en el mismo lugar y a los mismos suplidores la tonelada
de carbón a US$360 dólares, gracias a la intermediación del Presidente Abinader”, puntualizó el legislador en una conferencia de prensa en el CongresoNacional.
Agregó que hoy en día el país tiene más dudas que certezas, sobre la buena fe del presidente Abinader, “dados sus múltiples fracasos y falta de resultados en anteproyectos similares , de los cuales sólo acumulamos frustración”.
También llamó la atención sobre
la vocación alienante del patrimonio eléctrico, su conducta anajenante con las mineras Barrick Gold y Cormidon, así como con el fideicomiso Pro Pedernales,
“donde el Estado Dominicano ha tenido que invertir más de RD$10,000 millones
de pesos, para la primera puja, por citar algunos casos”.