Santo Domingo (R.D.).- El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales trabaja para que la isla Saona, que aloja la comunidad Mano Juan y recibe cada año a miles de turistas nacionales y extranjeros, se convierta en un modelo de espacio libre de foam y plástico de un solo uso.
Así lo planteó este viernes el viceministro de Áreas Protegidas y Biodiversidad, Federico Franco, al referirse a la Resolución 0024-2023, que abrió un plazo de dos meses para eliminar en el Parque Nacional Cotubanamá y el Monumento Natural Isla Catalina la utilización del foam y el plástico de un solo uso.
“La idea de Saona es convertirla en un modelo de que nosotros, los seres humanos, podemos vivir siendo parte del ecosistema, porque esa filosofía antropogénica que comenzó, después de la Revolución Industrial, cuando nosotros asumimos que somos los dueños del ecosistema, y ha hecho todos estos daños, tenemos que revertirla”, dijo Franco, al ser entrevistado por los periodistas Diógenes Pina y Esteban Delgado, en el programa El Despertador, del Grupo SIN, que se transmite por Color Visión, canal 9.
Franco recordó que los males creados por la visión errada que vio al ser humano como dueño de la naturaleza se revierten “creando una cultura de sostenibilidad” que despierte un guardián interior en cada persona, porque cuando se cuida a la naturaleza se protege a la raza humana.
Valoró la disposición con la que los touroperadores, los guías turísticos, la comunidad de Mano Juan se están integrando a la iniciativa que busca una Saona más limpia y con una mayor sostenibilidad. En ese sentido, resaltó, además, la disposición de algunas empresas a suplir productos en botellas de cristal.
Recordó que Medio Ambiente ya implementa medidas para evitar residuos de plástico en el Parque Nacional Armando Bermúdez. “Esta es un área que tiene mucho flujo turístico en la ruta al Pico Duarte, y la limpieza es simple: cuando no entran residuos no hay en el sendero y eso facilita el trabajo”, indicó.
Resaltó que Medio Ambiente fortalece la vigilancia en todas las áreas protegidas, con la remodelación de las infraestructuras que alojan los guardaparques. “Desde el año pasado hemos ido entregando varias. Por ejemplo, Sierra de Bahoruco se encuentra ahora mismo en un proceso de entrega de todas sus casetas; revisión del personal y, lo más importante, se le reajustó el salario”, resaltó