El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MMARN) inició este miércoles el derribo de alambradas en un área de Las Dunas de las Calderas lotificadas por desaprensivos dentro de esta importante área protegida de 25 kilómetros cuadrados.
Un equipo dirigido por Ney Soto, responsable de la Dirección de Áreas Protegidas del MMARN, comenzó un proceso de intervención que se enfocará en erradicar impactos documentados, como casas en construcción que ya están paralizadas, la extracción de arena en Los Tumbaos, la invasión de las dunas en el área de Salinas y la deforestación en Las Calderas.
“Personalmente, estuve aquí desde el lunes temprano. Nuestra intervención hoy responde a un último levantamiento de la situación de las dunas que iniciamos en marzo pasado, cuando marcamos con una advertencia de paralización unas ocho construcciones ilegales dentro del área protegida, porque el Ministerio de Medio Ambiente tiene la determinación de enfrentar la situación, siempre amparado en su marco jurídico”, dijo Soto.
Las brigadas de Medio Ambiente y del Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA) tienen previsto erradicar daños como los provocados por cultivos de productos como limón, lechosa, plátano y maíz que se encuentren dentro del área protegida.
“Todos sabemos del sentir de los distintos sectores de Peravia, y de todo el país que muestra conciencia del valor que tiene para República Dominicana la conservación de estas dunas”, indicó.
“En este importante tema coincidimos con académicos. Lo mismo con religiosos, como el señor obispo Víctor Masalles, quien esta semana denunció que camiones recolectores de basura estarían entrando desperdicios sólidos y sacando arena, una denuncia que estamos investigando”, sostuvo.
“Consideramos a monseñor Masalles, al igual que otros líderes de distintas religiones, aliados en esta misión de proteger las dunas. No debemos olvidar que ellos tienen una mayor facilidad de promover, entre sus feligreses, la creación de una conciencia ambiental que pueda empoderar a todos los ciudadanos de Baní para asumir su cuidado”, agregó Ney Soto.