Santo Domingo.- El lujoso yate Flying Fox, que se encuentra anclado en el puerto de Santo Domingo, pertenece a un magnate ruso, aunque las autoridades no han revelado su nombre.
Agentes de la oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional de Estados Unidos (HSI, por sus siglas en inglés) visitaron este viernes el yate de lujo.
El lujoso yate atracó en República Dominicana la noche de este lunes. De acuerdo con la Autoridad Portuaria Dominicana, el Flying Fox llegó a Santo Domingo procedente de La Romana con un programa de estadía desde el 21 al 25 de marzo con la finalidad de reabastecerse de comida, combustible e higienizarse.
El Flying Fox tiene una dimensión de 136 metros de eslora, 5.6 metros de calado y bandera de islas Caimán.
Según CNN estos “superyates” han aparecido en puertos de todo el mundo.
Ahora, mientras las fuerzas rusas intensifican su mortífera campaña militar en Ucrania, los yates se están convirtiendo en objetivos clave de los aliados de EE.UU. y Europa, que prometen apoderarse de las propiedades de los facilitadores de Putin.
Las disputas ya están estallando: las autoridades francesas confiscaron un yate el miércoles por la noche que, según dijeron, estaba relacionado con Igor Sechin, un ejecutivo petrolero ruso sancionado y socio cercano de Putin, mientras se preparaba para huir de un puerto.
La empresa que administra el barco negó que Sechin fuera el propietario, mientras la Casa Blanca dijo que los funcionarios alemanes habían incautado el yate de otro oligarca en Hamburgo, En tanto las autoridades locales negaron que se hubieran confiscado barcos.