El colombiano Juan Esteban Montoya Caicedo, el único sobreviviente del naufragio de un bote con 40 personas frente a la costa de Florida, Estados Unidos, confesó que las personas a bordo eran de República Dominicana, Haití, Bahamas y Jamaica. También dijo que había un bebé y varias niñas jóvenes que intentaron el viaje.
El joven, que en el naufragio ocurrido hace más de una semana perdió a su hermana de 18 años, ofreció estas declaraciones luego de recibir el alta hospitalaria y reencontrarse con su madre.
“Fue muy emocionante volver a ver a mi mamá después de tanto tiempo. Era algo que deseaba hace mucho, y algo que de igual manera mi hermana también lo deseaba y lamentablemente ella no pudo estar”, señaló el colombiano, que fue avistado por los guardacostas sobre el bote volcado.
Montoya eligió hacer el viaje a EE.UU. en barco porque era más seguro que viajar a través de México y él y su hermana querían reunirse con su madre residente en territorio estadounidense, quien lo acompañó en la conferencia de prensa del lunes en Fort Pierce, Florida.
Estaba decidido a sobrevivir para poder contarles a sus padres lo que le pasó a su hermana, dijo. “Me duele mucho, mucho, mucho perderla, porque gasté toda la energía que pude cuando ya no tenía, buscándola”, dijo “Fue imposible encontrarla”.
Horas después de que salieran de las Bahamas, la embarcación volcó después de que su motor dejó de funcionar y las olas rompieron contra esta llenándola de agua, dijo.
Montoya vio por última vez a su hermana hundirse cuando el bote volcó.
Con el paso del tiempo, otros que estaban colgados del bote se resbalaban bajo las olas después de perder fuerza, dijo Montoya.
“La falta de comida, la falta de agua, la falta de descanso, te empieza a afectar más”, dijo.
“La soledad fue otro golpe”, dijo sobre convertirse eventualmente en la última persona que quedaba. “Pero no perdí la fe”.
Montoya fue rescatado por un buen samaritano el martes, dijo.
“Estaba boca abajo en el bote cuando escuché algo y sentí que me golpeaba una ola”, relató Montoya. “Había un bote cerca, no los saludé ni les hice señas, vinieron a mí y me dijeron que me ayudarían. Eran ángeles, para ser honesto”.
La Guardia Costera de EE.UU., que había estado buscando sobrevivientes, dijo que el capitán de un remolcador le notificó que había rescatado a un hombre aferrado a un barco volcado a 72 kilómetros al este de Fort Pierce Inlet.
Después de ser encontrado, Montoya fue llevado a un hospital local para ser tratado por síntomas de deshidratación y exposición al sol, dijo la Guardia Costera en un comunicado de prensa. Montoya actualmente está solicitando asilo político, según su abogada Naimeh Salem.
“Estos días han sido bastante difíciles, muy duros por la ausencia de mi hermana. Cuantos más días pasan, más se siente la ausencia. El dolor es muy grande”, dijo Montoya. “Mi corazón se partió en dos y parte de él me fue arrebatado”.
La Guardia Costera buscó sobrevivientes adicionales en un área que se extendía desde las Bahamas hasta Cabo Cañaveral, pero suspendió la búsqueda después de varios días. Solo cinco cuerpos fueron recuperados. La embarcación de unos 7 metros transportaba al menos 40 personas cuando volcó en Fort Pierce Inlet, dijeron las autoridades.
Si bien los agentes de la Guardia Costera de EE.UU. sospechan que se trataba de una operación de tráfico de personas, no comentaron sobre las nacionalidades de los individuos a bordo. Las autoridades de Seguridad Nacional están solicitando cualquier información que conduzca al arresto y enjuiciamiento de los involucrados en el viaje y el hundimiento.
Fuente: Externa