El exministro de Economía, Planificación y Desarrollo, Isidoro Santana, precisó que los economistas del gobierno cometieron un error en transmitirle a la población la imagen de que el país necesitaba una reforma fiscal para dar satisfacción a los inversionistas internacionales, cuidar la imagen del país y tratar de mantener la sostenibilidad de la deuda pública, al precisar que la esencia de las reformas fiscales tienen otros objetivos.
“La reforma fiscal es para que la República Dominicana pueda tener un buen servicio de policía, un buen servicio de salud, una buena infraestructura de carreteras y caminos… de eso era que se trataba, y la población probablemente no lo entendió así”, explicó el economista.
Manifestó que la población se puso muy contenta con el anuncio del presidente de que no habría reforma fiscal, lo que calificó como un sacrificio político.
“Lo vi de otra manera: el presidente sacrificó popularidad futura por popularidad presente, porque no hay duda que se hizo mucho más popular con el anuncio, pero corre el riesgo de que muchas de las cosas que ha estado prometiendo y que ha estado anunciado, sencillamente no las pueda hacer por falta de recursos”, advirtió.
Santana señaló que ciertamente una reforma fiscal “es necesaria, pero no para hacer lo que hemos estado haciendo toda la vida”, sino para resolver los principales problemas del país.
Sobre cuándo sería prudente hacer una reforma fiscal, el exministro de Economía, Planificación y Desarrollo dijo que, ciertamente en medio de una crisis como la que se vive con la pandemia, no sería lo más adecuado.