El anuncio de que desde el próximo mes de noviembre se fijará la nueva tarifa para el cobro de la energía eléctrica, al parecer, sufrió un adelanto ante el alza que se ha reflejado en los cobros de septiembre y octubre, según denuncias de muchos usuarios del servicio.
Algunos alegan que, incluso en apartamentos cerrados durante uno y dos meses, han llegado facturas de más de 12 mil pesos, sin que haya atrasos en los pagos.
ONPECO reclama transparencia en la facturación, que se le permita a los usuarios ejercer el derecho a la información para así tener la oportunidad de hacer un uso racional del servicio y no ser sorprendido con un recibo que rompería con el presupuesto de las familias.
La entidad de defensa de los consumidores valora como oportuno y positivo una evidente mejoría en el suministro de energía, lo cual es también un derecho, pero reclama que haya transparencia y un elevado nivel de información para que los usuarios realicen un consumo responsable del servicio y racionalicen el uso del mismo.
Es necesario que haya una continua educación sobre el consumo de energía, iniciando con que tiene un componente importado, que el país debe pagar en dólares, que es un servicio muy caro que hay que pagar, y, además, los reguladores deben facilitar insumos para que en los hogares se tomen medidas que contribuyan al ahorro.
Cada ciudadano tiene derecho a saber el costo de un kilovatio, el consumo de los electrodomésticos de los hogares, y así, con la información adecuada y oportuna la población pueda implementar medidas que fomenten el ahorro.
ONPECO propone, también, que se proporcionen facilidades para que la población obtenga artículos de bajo consumo, a precios justos y con el fomento de esas políticas de responsabilidad social la ciudadanía contribuya al ahorro de energía.
Las facilidades y políticas de fomento deben ser transferidas a los usuarios, mediante algún mecanismo que muy bien podría implementar la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) y la Dirección de Aduanas.
Desde este Observatorio abogan por una factura justa y transparente que permita a los usuarios oportunamente la información requerida para el consumo responsable del servicio.
