La iniciativa generará más de 8 mil empleos y tendrá una inversión superior a los mil millones de pesos
El Gobierno dominicano lanzó este sábado el Plan de Manejo Integral de las Cuencas Hidrográficas Prioritarias con el fin de garantizar el agua como recurso indispensable para el desarrollo del país.
La iniciativa creará 8,900 empleos verdes, integrando a los comunitarios a la reforestación y restauraciones ecológicas en un total de 620 mil hectáreas y con una inversión de más de mil millones de pesos.
Mediante este plan, a cargo del Ministerio de Medio Ambiente, se recuperará y mantendrá la cobertura boscosa en zonas fundamentales para la producción hídrica, contrarrestando su degradación progresiva principalmente por la deforestación y erosión de los suelos.
En este sentido, el Presidente Luis Abinader aseguró que, con este plan, “prestamos especial atención a la protección de los suelos con vocación forestal, a la mejora del régimen de las aguas, a la lucha contra los incendios forestales y otros agentes nocivos, que afectan la conservación de la biodiversidad y los beneficios ambientales que brindan las cuencas hidrográficas”.
El mandatario se hizo acompañar del ministro de Medio Ambiente, Orlando Jorge Mera, dando inicio al plan con la siembra de árboles en la cuenca alta del Río Nizao, una de las más productivas del país y donde se intervendrán 400 tareas de tierra con 10 mil plantas de Pino criollo (Pinus occidentallis), Cedro (Cedrela odorata) y Café.
Esta cuenca abastece de agua potable a más de 1.7 millones de personas; suministra el 40% del agua potable a la ciudad de Santo Domingo y produce agua de riego que son aprovechadas en el regadío de 14,000 hectáreas de vocación agrícola en las provincias de Peravia y San Cristóbal, afirmó el Jefe de Estado.
La irrigación de hectáreas agrícolas no solo es beneficiosa para el consumo humano, sino también para el mantenimiento de infraestructuras hidráulicas y garantizar la sostenibilidad socioeconómica y ambiental de las comunidades que impactan.
“Bajo este nuevo marco que establecemos, damos cuenta de que estamos cambiando; poniendo la inclusión, el desarrollo humano y ambiental en primer plano”, agregó el presidente.
Mientras, el ministro Jorge Mera dijo que con este plan se mejorará la calidad del agua, el flujo estable, la regulación de avenidas o inundaciones, la protección de costas, la estabilidad de la producción agropecuaria, entre otras.
De su lado, la gobernadora de San José de Ocoa, Olivia Castillo manifestó que, “la recuperación, defensa y protección de cada una de las cuencas ubicadas en los diferentes distritos hidrológicos del país es un mandato expreso de la ley y un compromiso con el que debe cumplir todo gobierno comprometido con la conservación de los recursos naturales”.
Estuvieron presentes Limbert Cruz, ministro de Agricultura; Luis Miguel de Camps, ministro de Trabajo y José Antonio Castillo, Senador de San José de Ocoa.
También acompañaron al mandatario el vicealmirante Ramón Gustavo Betances Hernández; comandante general de la Armada, Yaris Encarnación; diputada de la provincia, Fernanda de León; viceministra de Recursos Forestales, Deisy Encarnación de la Asociación de Caficultores Orlando Mazara.
Así como el señor Carlos Mejía, presidente de la Asociación para el Desarrollo y el señor Alcedo de Los Santos, Alcalde de Rancho Arriba.
Cuencas seleccionadas
En el marco de este plan se busca reforestar 15 cuencas y subcuencas hidrográficas que abarcan 17,606 kilómetros cuadrados, entre estas las de los ríos Yaque del Norte, Yaque del Sur, Macasía, Ozama-Isabela, Baní y Nizao.
Las demás cuencas incluyen las de los ríos Yuna, Nigüa, Ocoa, Higüamo, Artibonito, Haina y Soco. Entre todas abarcan una población superior a los cinco millones de habitantes, 14 presas y 6 hidroeléctricas que generan 950 Gwh/año.
Asimismo, cuentan con 10 distritos de riego que benefician a 84,641 familias y aportan agua superficial y/o subterránea para 88 acueductos, así como electricidad.
La selección de estas obedece al deterioro de sus recursos naturales, los índices de pobreza, niveles de contaminación de sus aguas, la existencia de obras hidráulicas y las poblaciones existentes.
De igual forma, en ellas se produce el 75% de los rubros alimenticios de consumo nacional y exportación.