Sociedad de Pediatría se une al llamado pro-vida en rechazo a la despenalización del aborto

Sociedad de Pediatría se une al llamado pro-vida en rechazo a la despenalización del aborto

Tras varias reuniones y un consenso del  72% de los pediatras asociados,  La Sociedad Dominicana de Pediatría fija su postura ante el tema de “Las Tres Causales”, rechazando de plano la aprobación de estas para justificar el aborto, ya que argumentan que  son anticientíficas, así como la puerta de entrada al relajamiento y al abuso de millones de niños que tienen el derecho a nacer y a vivir. 

Las declaraciones fueron expuestas mediante un comunicado de prensa de la sociedad médica, quienes llevaron este acuerdo entre sus 17 filiales, siendo uno de los gremios más grandes de la medicina especializada en el país.

Los doctores Marcos Díaz Gullen y Pedro Marte, representantes de la directiva de esta sociedad especializada en la salud infantil, desmontan la posición presentada explicando cada causal, agregando que este documento médico fue depositado ante la Comisión Especial de la Cámara de Diputados que estudia el Proyecto de Ley. 

“El aborto es el término médico que define la pérdida o finalización del embarazo antes de cumplirse las 20 semanas de gestación. El aborto espontáneo es la respuesta natural y fisiopatológica en ese rango de tiempo en el estado gestación. Cuando el aborto es provocado, existe un dolor disfrazado de cientificismo para justificarlo”, así cita este informe. 

Los pediatras consideran que no puede basarse esta decisión en un parecer, sino en la ciencia, que es la base en la que se fundamenta la práctica profesional del médico.  Las tres causales para justificar el aborto a evaluar son: 1- El inminente peligro de muerte de la mujer embarazada; 2- La violación o incesto y; 3- Malformaciones congénitas incompatibles con la vida. 

“Por nuestros estudios, los médicos sabemos que al momento de la fecundación se producen los siguientes fenómenos: Restablecimiento del número diploide de cromosomas, la mitad proviene del padre y la otra mitad de la madre. Por lo tanto, el cigoto, que es la célula resultante de la unión de las células sexuales masculinas y femeninas a partir de la cual se desarrolla el embrión, contiene una combinación de cromosomas distinta a la de los progenitores. Por lo tanto, ese embrión o el feto, es un ser humano distinto que no es parte del cuerpo materno”, puntualiza Díaz  Guillén.

El comunicado destaca que decidir sobre una persona no nacida, en una etapa de la vida que los pediatras tanto han defendido, es un crimen; agregando que este es el tiempo de más indefenso  y vulnerable del ser humano.

Las causales y la ciencia

  1. INMINENTE PELIGRO DE MUERTE DE LA MUJER EMBARAZADA.

La Sociedad Dominicana de Pediatría hace hincapié en que esta causal no tiene base científica, porque las patologías del embarazo que pueden poner en peligro de muerte a la madre casi nunca se ven tan temprano, sino a partir del tercer trimestre del embarazo. Revelan que tampoco tiene base jurídica, porque el artículo 110 de nuestro código penal, protege al médico que, habiendo agotado todos los recursos disponibles para salvar a la madre, tiene que interrumpir el embarazo poniendo en riesgo la vida del niño (como lo es la preeclampsia y eclampsia situación, en la que nace un niño que se salva casi en el 100% de los casos). 

  1. VIOLACIÓN O INCESTO

Para este gremio, la solución no es el aborto sino enjuiciar al abusador y eliminar las causas socio culturales, educacionales y económicas que están generando el problema. Cuando la mujer es violada dentro del seno familiar, que es lo común, cuando se le obliga a abortar o ella misma lo pide, se produce en ella un síndrome posaborto muy bien definido que se caracteriza por graves sentimientos de culpa, tristeza, depresión, alcoholismo, abuso de drogas ilícitas, frigidez y suicidios.

  1. MALFORMACIONES CONGÉNITAS INCOMPATIBLES CON LA VIDA.

Para ellos,  los doctores ni nadie tienen la autoridad de decidir quién debe nacer o morir por padecer una condición médica determinada. Destacan que no hay total certeza de que un feto in útero con unas malformaciones no pueda sobrevivir o tener calidad de vida, de acuerdo a los métodos diagnósticos bioquímicos o de imágenes, ya que existe un porcentaje de error tecnológico y humano.

“Los pediatras preferimos, que sea el defecto mismo el que decida si realmente es compatible con la vida o no. Porque aquellos que son “tan defectuosos”, fallecen muy pronto después de haber nacido, si es que nacen; así como hay muchos adultos haciendo vida normal, que se creyó no vivirían”, explican los especialistas.