SANTO DOMINGO.- El Presidente Luis Abinader , exaltó a la heroína nacional Rosa Protomártir Duarte Díez al Panteón Nacional y dispuso erigir un cenotafio con la inscripción del nombre de la ejemplar patriota en el Panteón de la Patria, hasta que sean localizados sus restos mortales y trasladados a su noble sepultura.
La medida fue adoptada por el mandatario mediante el decreto 566-20 del 15 de octubre de 2020, y fue anunciada durante un acto realizado en la Casa-Museo de la Familia Duarte (Instituto Duartiano), que inició con el izamiento de la Bandera Nacional y la interpretación del Himno Nacional a cargo de la banda de música del Ejército de la República Dominicana (ERD).
La actividad fue encabezada por la ministra de Cultura, Carmen Heredia de Guerrero (presidenta de la Comisión de Exaltación); también la ministra de la Mujer, Mayra Jiménez; Juan Pablo Uribe, presidente de la Comisión Permanente de Efemérides Patrias; Wilson Gómez, presidente del Instituto Duartiano y Ángel Hernández, en representación de Roberto Cassá, director del Archivo General de la Nación, entre otros.
El Viceministro de Defensa para Asuntos Navales y Costeros, Vicealmirante Joaquín Peignand Ramírez, ARD, estuvo en representación del Ministro de Defensa Teniente General Carlos Luciano Díaz Morfa, ERD.
Luego, del acto los presentes se dirigieron al Panteón Nacional, donde se le rindieron los honores militares a la insigne heroína y se procedió a la lectura de la Orden del Día; luego participaron en una eucaristía, oficiada por Fray Jit Manuel Castillo de la Cruz.
En la ceremonia se dio lectura a la orden del día por el Coronel Historiador, Sócrates Suazo Ruíz, ERD., Director General de historia del MIDE, quien destacó que “con este solemne ceremonial las Fuerzas Armadas enaltecen con sus estandartes enhiestos, sus corazones de soldados comprometidos y rebosantes de gratitud, la memoria inmortal a la heroína independentista Rosa Duarte y Díez, en el bicentenario de su natalicio (junio 1820-2020), y en reconocimiento a su entrega sin límites a la lucha por la regeneración política y patriótica de la Nación dominicana, cuyas manos próceras construyeron cartuchos y balas usadas la noche memorable del 27 de febrero de 1844”.