El presidente Danilo Medina recibió a productores de cigarros premium hechos a mano en el país, quienes manifestaron su preocupación ante una propuesta de regulación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés).
Las normas, que implementaría la agencia del gobierno de los Estados Unidos responsable de la regulación de alimentos con respecto a los puros de primera calidad, representarían un gran desafío para la industria de cigarros premium en la República Dominicana.
En el encuentro, que tuvo lugar en el Salón Privado del Palacio Nacional, participaron Carlitos Fuente y Ciro Cascella, de la Tabacalera Fuente; Litto Gómez, de La Flor Dominicana; Jochy Blanco, de la Tabacalera La Palma; y Alfredo Gómez, de Tabacos de Villa González.
Estos productores manifestaron que la regulación que la FDA se propone implementar no reconoce las diferencias fundamentales entre los puros artesanales de primera calidad y otros productos de tabaco.
En virtud de ello, consideraron que sería prudente y conveniente solicitar al gobierno de los Estados Unidos el establecimiento de una excepción con los cigarros premium hechos a manos.
La implementación de esas regulaciones representaría una amenaza a una industria que es una piedra angular de la economía dominicana, con más de 300 mil familias beneficiadas directamente.
Además, las razones para someter los puros de primera calidad a la regulación giran en torno a dos cuestiones directas: el uso de los jóvenes y el impacto en la salud pública.
Sin embargo, múltiples estudios como la Encuesta Nacional Tabaco para Adultos de 2013 y el Estudio Nacional de Mortalidad Longitudinal de 1973-2011 demuestran que los niveles de uso de los puros de primera calidad de parte de los jóvenes y de riesgos para la salud son estadísticamente insignificantes, en comparación con otros productos de tabaco.
Estos hallazgos han sido confirmados en artículos publicados en la revista de la Asociación Médica Americana.
El gobierno de República Dominicana alenta a la FDA a tomar en cuenta estos estudios, ya que evidencian la necesidad de un nuevo enfoque regulatorio para los puros premium hechos a mano.
También está preocupado por el impacto económico que las regulaciones de la FDA tendrían sobre el empleo y la fabricación en nuestro país.
Los reglamentos como la aprobación previa al mercado, las nuevas tarifas de los usuarios, las advertencias onerosas, entre otras normas, afectarían la centenaria y tradicional industria de los tabacos dominicanos que generan más de 300 mil empleos y millones de dólares en ingresos de exportación.
Los cigarros hechos a mano han otorgado al país una posición de líder mundial, gracias al ambiente competitivo que ofrece el régimen de zonas francas.
De manera particular, la provincia de Santiago se ha convertido en la capital del tabaco, uno de los principales rubros de exportación, supliendo el 30% de la demanda global.
Durante el periodo 2012-2018, las exportaciones de cigarros se duplicaron, alcanzando la cifra de 850 millones de dólares en el año 2018.
Para este año, se estima que dichas exportaciones alcancen la suma de 1,000 millones de dólares.
República Dominicana posee tradición de cultivo de tabaco. Sus cigarros puros son los más populares en Estados Unidos, uno de los países con mayor arraigo tabaquero del mundo.
Nuestro país exporta más del 90 por ciento del tabaco que produce, tanto en rama como manufacturado en cigarros puros.
Con una importante proporción en las exportaciones nacionales, el tabaco y sus manufacturas han generado US$846 millones a distintos mercados.
Más de 3,000 productores trabajan el cultivo del tabaco con un impacto de 300,000 a 350,000 beneficiarios.
Esto significa una generación de más de 300,000 empleos directos.
Actualmente, en el país existen alrededor de 93 empresas dedicadas a la producción, industrialización y exportación del tabaco dominicano, siendo el 75% de estas zonas francas y el 25% restante capital privado.
Más de 7,000 millones de unidades de cigarros son producidos anualmente, de los cuales 260 millones corresponden a cigarros prémium o de elaboración artesanal.
El 90% de los cigarros hechos a mano en República Dominicana se dirigen a los Estados Unidos.
En los últimos seis años, la gestión de Danilo Medina ha implementado políticas públicas para mejorar la producción del tabaco dominicano de la mano de los productores del campo y empresas privadas.
El gobierno dominicano ha contribuido a la implementación de nuevas tecnologías que permitan la obtención de un tabaco de calidad, con el cual el país pueda seguir manteniendo su reputación como el mejor tabaco del mundo.