Santo Domingo.- El juez Amauri Martínez, del Tercer Juzgado de la Instrucción del Distrito Nacional, dictó este viernes un auto de no ha lugar en favor del imputado Juan Asael Martínez.
Martínez estuvo vinculado en el caso Medusa donde Jean Alain Rodríguez es el principal implicado, y rechazó un acuerdo con la Procuraduría General de la República.
Lo relevante de este caso es que el imputado había llegado un acuerdo con el Ministerio Público pero que en audiencia denunció que no sabía qué hacía en el expediente, relató como había cambiado su vida desde que fue involucrado en este caso de corrupción y expresó que entendía que lo que el MP buscaba era solo llegar a acuerdos.
Lo que dijo Asael hace tres meses sobre su caso
En su declaración ante el tribunal, el imputado en el caso Medusa expuso su situación y defendió su inocencia, explicando las circunstancias que lo llevaron a ser involucrado en la investigación. El acusado, relató cómo su vida cambió drásticamente desde el 8 de noviembre de 2021, cuando un programa noticioso lo señaló como parte de una supuesta asociación de malhechores para defraudar el erario público usando la Procuraduría General de la República Dominicana.
“Para la sociedad, fue una consternación y una sorpresa, pero para mí, la verdadera sorpresa fue verme en ese programa, yo que no tengo ningún tipo de afinidad con nada de lo ahí mencionado”, expresó el acusado. Motivado por sus familiares, el 21 de junio decidió apoderar al abogado Luis Guerrero para que lo representara legalmente ante la Procuraduría General de la República Dominicana y aclarara cualquier duda en torno a su persona.
El acusado relató que, acompañado de su abogado, se presentó en la oficina del magistrado Wilson Camacho, donde fue atendido por el fiscal Emanuel Ramírez. “Él me contestó con otra pregunta, que qué pensaba mi hermano de todo esto. Yo le respondí que tanto mi hermano como yo estábamos en total disposición de aclarar cualquier duda que hubiera surgido en torno a nuestras personas”, narró.
A pesar de su disposición para colaborar, el acusado indicó que el fiscal Ramírez le aseguró que no tenían nada que preguntarle y que se podía ir tranquilo. Sin embargo, nunca se le citó para aclarar su situación. Posteriormente, decidió buscar la defensa del doctor Miguel Valerio, quien descubrió que la imputación en su contra se basaba en un pago de 300 mil pesos que su hermano hizo a su tarjeta de crédito, un acto que calificó de “totalmente legal y legítimo.”
“Hoy estoy imputado en el caso Medusa y estoy compareciendo delante del juez Amauri Martínez por un pago que hizo mi hermano a una tarjeta de crédito en una entidad bancaria por la suma de 300 mil pesos. Un acto totalmente legal, un acto totalmente legítimo, un acto de reciprocidad llevado a cabo entre hermanos durante toda la vida”, enfatizó el acusado.
El imputado sugirió que la verdadera intención de su imputación era crear presión para lograr acuerdos, ya que el Ministerio Público no tenía nada en su contra. Explicó que, aunque eligió un criterio de oportunidad para salir del proceso sin mayores contratiempos, lo hizo porque el Ministerio Público no tenía pruebas en su contra.
El acusado, de 32 años, es egresado de UNIBE con una concentración en Recursos Humanos y Gerencia de PYMES, y tiene una maestría en Desarrollo Urbano y Territorial Sostenible. Durante su declaración, citó un versículo de la Biblia que dice que “el buen nombre vale más que el oro y la plata” y solicitó reserva al magistrado.