Nueva York, 25 de septiembre de 2023 — Durante su intervención en la 79.ª Asamblea General de las Naciones Unidas, el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, abordó la crítica situación en Haití, subrayando la importancia de la defensa de los derechos humanos como pilar fundamental de la democracia.
Abinader afirmó que “toda democracia exige un compromiso con la defensa de los derechos humanos”, y destacó que el Gobierno dominicano está firmemente comprometido con esta causa a nivel nacional e internacional. “Este compromiso forma parte integral de nuestra política exterior”, subrayó, enfatizando que no hay cálculos ni bandos, solo principios.
El presidente señaló que la inestabilidad en Haití, que persiste desde hace más de tres años, ha generado una presión significativa sobre la seguridad de la República Dominicana.
El presidente Abinader ha solicitado mas colaboración activa de la comunidad internacional para estabilizar a la nación haitiana, considerándolo una necesidad estratégica para toda la región.
En su discurso, el mandatario reveló que el Estado dominicano ha asumido responsabilidades que van más allá de lo que le corresponde, proporcionando servicios esenciales a la población haitiana. En 2023, las atenciones médicas a inmigrantes haitianos representaron el 12% de los servicios prestados en el sistema de salud pública dominicano. Además, cerca de 200,000 menores extranjeros están inscritos en el sistema educativo público, de los cuales aproximadamente 147,906 son de origen haitiano.
Abinader también agradeció a los países que han apoyado la misión de estabilización en Haití, en particular a Kenia, Estados Unidos, Jamaica, Bahamas y El Salvador, así como a CARICOM por sus esfuerzos en el diálogo. Sin embargo, advirtió que hasta el momento solo se han desplegado 400 efectivos de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad (MSS), cuando se requieren al menos 2,000 para ser efectivos.
El presidente expresó su preocupación por la falta de recursos depositados en el fondo fiduciario para Haití, lo que impide el despliegue pleno de la fuerza y el logro de los objetivos de pacificación. “Un fracaso en esta misión podría implicar la necesidad de adoptar medidas drásticas para proteger nuestra seguridad nacional”, advirtió.
Abinader concluyó esta parte de su discurso instando a la comunidad internacional a cumplir con sus promesas y reafirmando su compromiso de seguir reclamando por la estabilidad en Haití, enfatizando que el colapso del país tendría consecuencias graves para toda la región.