El Embajador de la República Dominicana ante el Reino de los Países Bajos, Carlos de la Mota, realizó una visita muy especial a Flow Barbershop, un reconocido establecimiento en La Haya fundado por manos dominicanas. Allí compartió con Jimmy, un barbero oriundo de Azua que ha sabido destacarse en el extranjero gracias a su talento, dedicación y amor por sus raíces.
La visita fue descrita como un encuentro cargado de alegría, identidad y orgullo nacional, en el que el embajador aprovechó para escuchar historias, compartir anécdotas y reconocer el esfuerzo de los dominicanos que, desde lejos, llevan su patria en el corazón.
“Cada dominicano en el exterior es un embajador de lo mejor que somos como pueblo”, expresó De la Mota, destacando la importancia de visibilizar el trabajo de quienes, como Jimmy, aportan al fortalecimiento de la imagen del país más allá de sus fronteras. Para el embajador, este tipo de encuentros reflejan el verdadero valor de la diáspora: personas trabajadoras, orgullosas de su origen y comprometidas con dejar una huella positiva donde quiera que estén.
La visita fue celebrada con entusiasmo tanto por la comunidad dominicana en los Países Bajos como por seguidores en redes sociales, que vieron en el gesto un mensaje claro de cercanía, reconocimiento y apoyo institucional.









