La contaminación por plásticos ha alcanzado niveles críticos, y organismos internacionales como las Naciones Unidas y la UNESCO están intensificando sus llamados a la acción inmediata para enfrentar esta crisis ambiental global.
Cada día se producen más de 300 millones de toneladas de plástico, pero apenas el 9 % logra ser reciclado. Lo más alarmante: este material tarda hasta 1,000 años en degradarse, lo que significa que prácticamente cada pieza de plástico que se ha fabricado aún existe en el planeta.
El impacto es devastador para la vida silvestre y los ecosistemas. Millones de animales marinos, como tortugas, aves y peces, mueren cada año tras ingerir plásticos o quedar atrapados en residuos flotantes. La imagen de una tortuga enredada en una bolsa plástica, compartida en redes por Las Naciones Unidas en colaboración con la UNESCO, se ha vuelto un símbolo de esta emergencia ambiental.
“La relación tóxica con el plástico debe terminar”, afirman desde las Naciones Unidas. Exigen medidas firmes por parte de los gobiernos y empresas para frenar la producción y el uso indiscriminado de plásticos, especialmente los de un solo uso.
El mensaje es claro: educar, reducir y actuar ahora. Bajo la etiqueta #SinContaminaciónPorPlásticos, se busca impulsar un movimiento global que abogue por políticas sostenibles, alternativas ecológicas y un cambio de hábitos que permita preservar el planeta para las futuras generaciones.











