Violencia de pandillas en Haití deja 1,700 muertos en últimos meses de 2024; 75 niños entre las víctimas

Violencia de pandillas en Haití deja 1,700 muertos en últimos meses de 2024; 75 niños entre las víctimas

La Oficina Integrada de las Naciones Unidas en Haití (BINUH) reveló en un informe donde detalla que la violencia de las pandillas, grupos de autodefensa y las fuerzas de seguridad dejó más de 1,700 muertos y 411 heridos en el último trimestre de 2024, con un incremento del 22% respecto al trimestre anterior. Entre las víctimas se cuentan 75 niños, un dato que subraya la creciente vulnerabilidad de la infancia haitiana en medio de una crisis que parece no tener fin.

El periodo comprendido entre el 1 de octubre y el 31 de diciembre de 2024 fue uno de los más sangrientos en la historia reciente del país, con 1,732 muertos y 411 heridos por la violencia de las bandas criminales, las respuestas militares y la lucha de los grupos de autodefensa. La tragedia ha tocado de manera desproporcionada a los hombres, que constituyen el 77% de las víctimas, mientras que las mujeres y los menores de edad representan el 19% y el 4%, respectivamente.

En el epicentro de este desolador panorama se encuentra la capital, Puerto Príncipe, y las zonas circundantes como Artibonito, el Departamento Central y el Norte del país, donde los abusos y las atrocidades no cesan. El informe de la ONU también destaca el alarmante aumento de los secuestros, que crecieron un 150% en comparación con el trimestre anterior, alcanzando a 431 personas.

La violencia sexual contra mujeres y niñas también ha escalado en los barrios de Puerto Príncipe bajo control de las bandas armadas, generando un clima de terror generalizado. El informe de la BINUH subraya que las bandas criminales son responsables del 46% de las víctimas, las operaciones de las fuerzas de seguridad del 39% y los grupos de autodefensa del 15%. La situación de la infancia es especialmente grave, con un aumento del 70% en el número de menores asesinados y heridos en comparación con el trimestre anterior. La trata de niños y su utilización por parte de las pandillas son algunas de las prácticas más temidas, lo que ha llevado a UNICEF a alzar su voz en señal de alarma.

Más de 700.000 haitianos, más de la mitad de ellos niños, se han visto forzados a abandonar sus hogares debido a la violencia. El Programa Mundial de Alimentos (PMA) informa que el 82% de los desplazados vive en condiciones extremas, comiendo solo una vez al día o, en muchos casos, pasando días enteros sin alimentos. Esta grave situación ha alterado profundamente el acceso a la educación y los servicios de salud, especialmente para los más jóvenes, quienes no sólo se enfrentan a la violencia, sino también a la falta de recursos para sobrevivir.

El vacío de poder en Haití sigue siendo una preocupación central, tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021. Desde entonces, el país ha atravesado una grave crisis política que ha sido aprovechada por las bandas para expandir su control territorial. A pesar de los esfuerzos por parte de la comunidad internacional, la situación sigue empeorando, dejando a los ciudadanos haitianos atrapados en una espiral de violencia que parece no tener fin.

Con la toma de posesión de Alix Didier Fils-Aimé como nuevo primer ministro en noviembre de 2024, la comunidad internacional sigue esperando soluciones urgentes para restaurar la seguridad y estabilidad en el país. Sin embargo, la crisis humanitaria y política continúa siendo una de las más complejas y desafiantes de la región, mientras Haití lucha por encontrar un camino hacia la paz y la reconstrucción.