La ciudad de Goma, en el este de la República Democrática del Congo, enfrenta una grave crisis humanitaria tras ser capturada este domingo por el grupo rebelde M23, respaldado por fuerzas ruandesas. Los rebeldes llegaron hasta el aeropuerto de la ciudad, obligando a miles de personas a huir en medio del caos, mientras intensos combates dejaron al menos 13 cascos azules de la ONU fallecidos.
La representante especial de la ONU en la RDC, Bintu Keita, informó en una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad que, pese al apoyo de tropas internacionales, el M23 y las fuerzas aliadas penetraron en el barrio de Munigi, ubicado a solo 9 kilómetros de Goma. Este avance provocó pánico generalizado y un desplazamiento masivo de la población, que teme por su seguridad.
En las últimas semanas, el grupo rebelde avanzó rápidamente en zonas fronterizas con Ruanda, consolidando su presencia militar en el área. La captura de Goma, una ciudad con alrededor de 2 millones de habitantes y considerada clave para los esfuerzos de seguridad y asistencia humanitaria representa un duro golpe para el gobierno congoleño y para la estabilidad de la región.