J.D. Vance, designado vicepresidente de Donald Trump para su segundo mandato, llegó a la Casa Blanca junto a su esposa previo a la investidura del presidente. Por lo general, solo el presidente electo llega a la Casa Blanca el día de la toma de posesión, antes de la juramentación.
Sin embargo, en esta ocasión, Vance arribó acompañado de su equipo para asumir su rol en el nuevo gobierno. La vicepresidenta saliente, Kamala Harris, saludó al vicepresidente electo en un gesto simbólico de respeto a la transición pacífica del poder.
Vance, quien ha sido un firme aliado de Trump y un defensor del movimiento MAGA, asumió su nuevo rol con el compromiso de impulsar políticas que fortalezcan la economía, la seguridad nacional y la unidad del país. En su discurso tras la toma de posesión, Vance reafirmó su apoyo a la visión de Trump para restaurar la grandeza de Estados Unidos y subrayó la importancia de la colaboración entre el Ejecutivo y el Congreso para implementar reformas clave.