La aerolínea estadounidense Spirit Airlines ha anunciado la eliminación de al menos 200 puestos de trabajo en varios departamentos como parte de sus esfuerzos para reducir gastos tras su declaración de quiebra en noviembre de 2024.
Spirit Airlines explicó en un comunicado que estos despidos forman parte de un proceso de redimensionamiento de la organización para alinear sus operaciones con el tamaño actual de su flota y el nivel de vuelos. La compañía destacó que la decisión, aunque difícil, tiene como objetivo optimizar sus operaciones.
La aerolínea de bajo costo detalló que estos despidos se suman a otros esfuerzos previos, como la reducción de la red de vuelos y la venta de parte de su flota de aviones Airbus, con el fin de generar ingresos adicionales. Además, la compañía ha logrado una reducción de 80 millones de dólares en costos anuales como parte de su estrategia para enfrentar la crisis financiera.
Crisis financiera y despidos previos
Spirit Airlines ya había despedido a cientos de pilotos y ofrecido licencias a miembros del personal de vuelo, en un intento por contener los costos. La crisis financiera de la aerolínea se profundizó en enero cuando el acuerdo para que Jetblue comprara la empresa por 6.600 millones de dólares se rompió, debido a la oposición del Departamento de Justicia de EE. UU. por considerar que infringiría las leyes antimonopolio.
Problemas financieros y reducción de la flota
Además de la ruptura del acuerdo de compra, Spirit ha enfrentado problemas como la retirada de motores de Pratt & Whitney y el aumento de los costos laborales tras la pandemia. Estos problemas han obligado a la aerolínea a tomar medidas drásticas para reducir su deuda y mantenerse operativa en el competitivo mercado de vuelos de bajo costo.
Esperanza de recuperación
A pesar de estos desafíos, Spirit Airlines ha expresado su esperanza de salir de la quiebra en el primer trimestre de 2025. En noviembre pasado, la compañía alcanzó un acuerdo para reducir su apalancamiento financiero, lo que le permitiría mantenerse en funcionamiento.
Impacto en los empleados
En el momento de la quiebra, Spirit Airlines empleaba a 13,000 personas, de las cuales aproximadamente el 84 % estaban representadas por sindicatos. Los recortes recientes se han centrado en los puestos no sindicalizados, según informes judiciales
