Una causa judicial abierta en EE.UU, contra el cineasta francés de origen polaco Roman Polanski por la supuesta violación de una joven de 13 años en 1973, un caso diferente al que lo llevó a huir del país al final de los años 70, fue cerrada en razón de un acuerdo entre las partes.
“Las partes acordaron una solución de las reclamaciones a satisfacción mutua”, señaló este miércoles a EFE Gloria Allred en una declaración escrita.
La abogada, que representa a Robin M., demandó a Polanski ante la justicia estadounidense en 2023.
Allred confirmó el acuerdo, algo que ya había hecho con anterioridad el abogado de Polanski, Alexander Rufus-Isaacs.
De esta manera, el juicio que iba a tener lugar en Los Ángeles a partir del 4 de agosto de 2025 no se celebrará.
Ninguno de los abogados dio detalles sobre el acuerdo.
Polanski huyó de EE.UU. en 1978 antes de que se dictará sentencia en un juicio en el que estaba acusado de haber violado a Samantha Geimer cuando ella tenía 13 años.
El director había admitido la violación para evitar acusaciones más graves y cumplido poco más de 40 días encarcelado cuando se marchó a Francia.
El caso ahora retirado por el arreglo extrajudicial es otro y fue abierto a raíz de una demanda civil presentada en 2023 por una mujer identificada como Robin M.
La demandante alegó que conoció al director en una fiesta en 1973 y que él la invitó a cenar en un restaurante, le dio a beber tequila y luego la llevó a su casa de Benedict Canyon, donde ella se desmayó en la cama.
Según la demanda, cuando se despertó vio a Polanski acostado junto a ella.
Él le pidió tener sexo y ella se negó pero aun así la violó, aseveró en la demanda Robin M., que pudo presentarla a pesar de los muchos años transcurridos gracias a una ley californiana que amplió el plazo para que los abusos sexuales prescriban cuando la víctima es menor de edad.
“Nuestra clienta (…) ha demostrado un enorme coraje al presentar su demanda contra un director famoso”, dijo la abogada de Jane Doe, Gloria Allred, cuando se presentó la demanda en los tribunales de Los Ángeles.
“Aunque el acusado parece haber vuelto a la normalidad en su vida, nuestra clienta no ha podido volver a la normalidad. Pero esperamos con ansias nuestra lucha por la justicia y la rendición de cuentas para Jane Doe”, agregó en una rueda de prensa.