Las lluvias y vientos del huracán Helene, que asoló el sureste de Estados Unidos en septiembre y provocó más de 230 muertos, fueron un 10% más intensos debido al cambio climático, según un estudio publicado el miércoles.
Este trabajo de la red World Weather Attribution (WWA) muestra también que los combustibles fósiles, principales causantes del calentamiento global, han hecho que huracanes como Helene sean 2,5 veces más probables en esta región.