El expresidente uruguayo José Mujica muestra progresos en su recuperación dos semanas después de una cirugía, y sigue de cerca la campaña para las elecciones nacionales de octubre, aseguró su esposa.
Lucía Topolansky dijo el martes por la noche que el exmandatario de 89 años presenta mejoría tras la gastrostomía que le realizaron el 7 de septiembre por una fibrosis ocasionada por la radioterapia que recibió hasta mediados de junio por un cáncer de esófago.
“Le pusieron esa forma de alimentarse con la sonda gástrica, es difícil acostumbrarse a eso, pero bueno, todos los días va dando un pasito más”, comentó Topolansky a periodistas.
“Yo tengo esperanza que de a poquito vaya recuperando toda la fuerza que perdió”, agregó, y celebró que ya pueda beber té por vía oral.
El expresidente, un exguerrillero que gobernó Uruguay de 2010 a 2015, recibió el alta del hospital el 13 de septiembre y desde entonces ha estado en su chacra (granja) en las afueras de Montevideo, donde vive con su mujer.
“Estar enchufado un rato tres veces al día a un aparato para que le pase la comida no es sencillo”, y eso pesa en su estado de ánimo, “pero de todos modos él ha seguido pensando en las cosas que hay que hacer en la chacra”, como “cortar la alfalfa”, y está atento a la actividad política, viendo los actos “por el celular”, contó Topolansky.
“Somos bichos políticos, pero estamos en el balcón, esa es la dificultad”, apuntó la ex primera dama y exvicepresidenta (2017-2020).
Mujica, que hace seis décadas se alzó contra gobiernos democráticos y pasó 13 años preso, la mayor parte durante la última dictadura (1973-1985), es una de las figuras políticas más populares de Uruguay. Su delfín, el candidato presidencial Yamandú Orsi, lidera la intención de voto para los comicios del 27 de octubre.
Consultada sobre si Mujica prevé ir a votar, Topolansky, una exguerrillera que como él se incorporó luego a la vida democrática, exclamó: “¡Cómo no va a ir a votar, pero por supuesto! Elemental”. Pensar lo contrario “es no conocerlo”.