El cantante Justin Timberlake fue condenado a realizar trabajos comunitarios por haber conducido en estado de ebriedad en junio, ordenó este viernes un juez de un tribunal del estado de Nueva York, después de que la estrella se declaró culpable.
Timberlake fue detenido el 18 de junio en la localidad de Sag Harbor, a unos 160 km al este de la ciudad de Nueva York, por conducir “borracho” tras saltarse una señal de pare y salirse del carril por donde circulaba en su automóvil al regreso de una cena con amigos.
El juez del Tribunal de Justicia de Sag Harbor Village, Carl Irace, condenó a Timberlake a realizar trabajos comunitarios y le ordenó que hiciera una declaración pública, después de que el artista de 43 años se declaró culpable de conducir bajo los efectos del alcohol, un cargo menor, informó la cadena NBC.
El cargo es una violación de tráfico que comporta una multa de entre 300 y 500 dólares y 90 días de suspensión de la licencia de conducir.
El intérprete de “Cry Me a River” le dijo al juez que estaba dispuesto a realizar entre 25 y 40 horas de servicios comunitarios, informó la NBC.
“Decisión diferente”
“Trato de comportarme de acuerdo a estándares muy altos. Este no fue el caso. Me encontré en una situación en la que podía haber tomado una decisión diferente”, dijo a la prensa fuera de la corte.
“Aunque solo hayas bebido una copa, no te pongas al volante de un auto, hay muchas alternativas”, aconsejó el cantante, vestido con chaqueta oscura y un collar de perlas.
“Crecí en una ciudad pequeña por lo que puedo entender y comprender la tensión o la naturaleza única de lo que esto debe haber sido para la gente de Sag Harbor (…) Estoy muy agradecido, les doy las gracias”, dijo.
Sag Harbor es un recóndita localidad en los Hamptons, un destino favorito de ricos y famosos, situado en la península de Long Island, conocido por sus fiestas exclusivas y sus mansiones suntuosas.
El oficial que le detuvo dijo que el intérprete de “Selfish” no se encontraba en condiciones de conducir, pese a que siempre había sostenido que solo había tomado un martini en el American Hotel durante la velada que pasó en compañía de unos amigos.
“Tenía los ojos inyectados en sangre y vidriosos, de su aliento emanaba un fuerte olor a bebida alcohólica, hablaba con lentitud, se tambaleaba y obtuvo malos resultados en todas las pruebas de sobriedad estandarizadas” que se le realizaron, reza el informe policial.
El abogado de Timberlake, Edward Burke Jr, dijo que la estrella fue respetuosa durante su encuentro con la policía.
“Contrariamente a lo que se informó, (Timberlake) no estaba tomando las bebidas de otras personas, ni se le advirtió de antemano que no condujera, no fue grosero, no fue odioso, no fue beligerante. De hecho, fue educado y cooperativo”, dijo fuera del tribunal.
“Su declaración de hoy de un delito no penal reducido y enmendado, que es una infracción de tráfico, es consistente con estos hechos”, señaló.