El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, lanzó duras críticas contra la vicepresidenta Kamala Harris, calificándola como “la candidata presidencial más débil de la historia en materia de delincuencia”. En un mensaje que rápidamente generó polémica, Trump acusó a Harris de permitir que millones de personas cruzaran las fronteras estadounidenses, incluyendo, según él, individuos procedentes de prisiones, instituciones psiquiátricas y hasta terroristas.
“Ha permitido que millones de personas crucen nuestras fronteras, muchas de ellas procedentes de prisiones, instituciones psiquiátricas y, de hecho, terroristas, llegando a niveles nunca vistos antes”, afirmó Trump, en referencia a la política migratoria de la administración actual, de la cual Harris ha sido una figura prominente.
Además, el exmandatario cuestionó la legitimidad de Harris para postularse a la presidencia, señalando que no obtuvo votos significativos en las primarias demócratas de 2020. “¿Qué le da derecho a postularse a la presidencia? No obtuvo ningún voto frente a los 14 millones de Biden. Fracasó en su intento anterior, fue la primera de 22 personas en renunciar, nunca llegó a Iowa y ¿ahora es candidata presidencial?”, expresó Trump con incredulidad.
Trump, conocido por su estilo combativo y retórico, no se detuvo allí, calificando la posible candidatura de Harris como “una amenaza para la democracia”. Este ataque se enmarca en el contexto de las especulaciones sobre una posible candidatura de Harris en las elecciones presidenciales de 2024, aunque la vicepresidenta no ha confirmado oficialmente su intención de postularse.
Las declaraciones de Trump han generado reacciones mixtas, con sus seguidores aplaudiendo su crítica directa, mientras que sus detractores lo acusan de utilizar tácticas divisivas y de socavar la confianza en el proceso democrático.
Con el clima político estadounidense cada vez más polarizado, estas declaraciones anticipan una campaña electoral intensa y llena de controversias en los próximos meses.