Edrick Lamar Davis, un padre de Florida de 25 años, enfrenta cargos de homicidio grave en primer grado y abuso infantil agravado tras la muerte de su hijo pequeño.
Las autoridades del condado de Brevard en Florida detallaron que Davis usó palabras como “accidentalmente” e “involuntario” al describir cómo le dio rodillazos repetida y fatalmente a su hijo en la cabeza.
El incidente ocurrió el 10 de junio a las 11:11 am, cuando policías y paramédicos respondieron a una llamada al 911 realizada por Davis, quien afirmó haber encontrado a su hijo inconsciente, según informó Law&Crime.
El niño fue trasladado al hospital, donde fue declarado muerto a las 11:55 am. Los primeros socorristas notaron un pequeño hematoma en el hombro izquierdo del bebé y rasguños en su cara.
Resultados de la autopsia
La autopsia, realizada por el Dr. Schmidt, reveló múltiples lesiones internas causadas por traumatismos contundentes. Estas incluían contusiones en la parte posterior de la cabeza, una hemorragia cerebral subdural aguda, hemorragias del nervio ocular, fracturas de clavícula, tibia, costillas y mandíbula, así como otros signos de traumatismo grave.
Además, se encontraron fracturas de costillas más antiguas en proceso de curación y un hematoma en el cuello del bebé, lo que indicaba abuso físico previo.
La conclusión del médico forense fue que la causa de la muerte fue “traumatismo múltiple por objeto contundente” y que se trataba de un homicidio, según Law&Crime.
Davis y una mujer, cuya identidad no ha sido revelada, dieron relatos consistentes sobre los eventos previos al descubrimiento del bebé. Ambos afirmaron que el niño estaba sano y no tenía condiciones preexistentes que explicaran su muerte repentina.
La mujer mencionó que había alimentado al bebé con fórmula antes de entregárselo a Davis y luego se fue a duchar. Tras regresar, encontraron al bebé inconsciente con fórmula saliendo por su nariz. Davis realizó maniobras de RCP mientras la mujer llamó al 911.
Inicialmente, Davis dijo que había acostado al bebé sobre su lado derecho después de alimentarlo y, al regresar, lo encontró con fórmula saliendo de su nariz. Sin embargo, tras ser confrontado por los investigadores sobre las lesiones cerebrales, Davis admitió haber causado la muerte del bebé, detalló el medio antes citado.
Confesión y evidencia
En su confesión, Davis describió cómo “accidentalmente” golpeó la cabeza del bebé contra el marco de una puerta, provocando que llorara. Posteriormente, intentó evitar que el bebé cayera de sus brazos, golpeando con fuerza la parte posterior de su cabeza con la rodilla.
