Washington, 24 jun (EFE).- Joly Germine, que se describe a sí mismo como el “rey” de una violenta pandilla en Haití, fue sentenciado este lunes en una corte de Washington a 35 años de prisión por cargos relacionados con el contrabando de armas desde EE.UU. y el secuestro de ciudadanos estadounidenses en el país caribeño, informó el Departamento de Justicia.
Germine, de 35 años, se declaró culpable en enero pasado de cargos relacionados con la compra en Estados Unidos de al menos 24 armas de fuego, incluidos rifles AK-47, AR-15 y una Carabina M4, armas que fueron enviadas a Haití para promover las actividades criminales de la pandilla 400 Mawozo, la más grande del país, de la que él era su líder.
Las armas fueron compradas con las ganancias obtenidas por los rescates pagados por los familiares de ciudadanos estadounidenses secuestrados en Haití en 2021.
En este caso también fue vinculada la exnovia de Germine, Eliande Tunis, de 46 años y residente en Florida. La mujer se declaró culpable en enero pasado y fue sentenciada a 12,5 años de prisión.
Según documentos judiciales, Germine dirigió las operaciones de la pandilla desde una prisión en Haití utilizando teléfonos celulares y ordenando a Tunis y otros dos acusados comprar las armas de fuego que fueron enviadas al país caribeño camufladas en contenedores de alimentos y enseres domésticos.
La pandilla 400 Mawozo operaba en la zona de Croix-des-Bouquets, al este de la capital, Puerto Príncipe.
En el juicio, los fiscales presentaron pruebas de que la banda recibió pagos de rescate por la toma de rehenes de tres ciudadanos estadounidenses en el verano de 2021.
El dinero del rescate se transfirió a Estados Unidos para comprar más armas de fuego.
En el otoño de 2021, la pandilla se atribuyó la autoría del secuestro de 16 ciudadanos estadounidenses, incluidos cinco niños, y un ciudadano canadiense que formaban parte de una organización misionera que visitaba un orfanato en Puerto Príncipe, por los que pidieron un millón de dólares.
Germine, extraditado a EE.UU. en 2022, ha sido acusado de forma separada por esa toma de rehenes y la sentencia de hoy no incluye esos cargos, explicó el Departamento de Justicia.
Tras la sentencia, el fiscal general de EE.UU., Merrick B. Garland, dijo en un comunicado que “los líderes de las bandas violentas en Haití que aterrorizan a los ciudadanos estadounidenses para alimentar su actividad criminal se enfrentarán con toda la fuerza del Departamento de Justicia”.
El director del FBI, Christopher Wray, señaló que la pandilla 400 Mawozo “no solo causa estragos en sus propias comunidades, sino que también ataca a estadounidenses inocentes que viven y viajan a Haití”.