Luis Gustavo Aroyo-López, el hombre que decapitó a su abuela en California y arrojó su cabeza a un arroyo cercano, se declaró culpable del asesinato, según los registros judiciales.
Aroyo-López, de 24 años, enfrenta una sentencia de 26 años a cadena perpetua con posibilidad de libertad condicional. El acuerdo se produjo tras una reunión a puerta cerrada entre los fiscales y los abogados defensores antes de una audiencia preliminar, informó The Press Democrat.
Los familiares de la víctima se secaron las lágrimas mientras Aroyo-López se declaraba culpable. La sentencia está prevista para el 27 de junio.
Detalles del crimen
El 2 de noviembre, los agentes del Departamento de Policía de Santa Rosa respondieron a un posible homicidio en la cuadra 2500 de Pomo Trail alrededor de las 3:40 pm. Al llegar, encontraron el cuerpo decapitado de Elvia López-Aroyo, de 64 años, pero su cabeza no estaba en el lugar.
Los investigadores determinaron que Aroyo-López había matado a su abuela en un “ataque selectivo” antes de llevarse la cabeza. Varias armas fueron recuperadas de la casa, pero el motivo del ataque no ha sido revelado.
Arresto y recuperación de la cabeza
El 4 de noviembre, un oficial del Departamento de Policía de San Francisco reconoció a Aroyo-López en el Transbay Transit Center y lo detuvo sin incidentes. Los detectives de la policía de Santa Rosa lo llevaron de regreso al Centro Principal de Detención de Adultos del Condado de Sonoma.
Alrededor de las 7:30 pm del mismo día, la policía encontró la cabeza de Elvia López-Aroyo en la orilla sur del arroyo Santa Rosa, aproximadamente a media milla de donde fue asesinada. La cabeza fue llevada a la oficina del médico forense para una mayor investigación.
Reacción de la familia
La muerte de Elvia López-Aroyo ha dejado a su familia en estado de shock. Uno de sus nietos inició una campaña en GoFundMe para recaudar dinero para los gastos del funeral. “Era una persona cariñosa y adoraba muchísimo a todos sus nietos. Ella no merecía lo que le hicieron. Su muerte ha impactado mucho a nuestra familia y estamos buscando ayuda durante este momento de desesperación”, dice el relato.
Aroyo-López había sido encarcelado anteriormente por agresión con un arma mortal y cargos de posesión de armas, aunque esos cargos no estaban relacionados con la víctima de este incidente.