Para Joe Biden, Barack Obama es uno más de “la familia”, pero las relaciones familiares son complicadas, y los dos hombres que hacen campaña juntos por la reelección del demócrata de 81 años, no son una excepción a la regla.
El expresidente Obama (2009-2017) visitó el viernes la Casa Blanca para grabar un mensaje de campaña sobre salud junto a Joe Biden, quien fue su vicepresidente.
El 28 de marzo, en Nueva York, volverá a estar a su lado, junto a Bill Clinton, que ocupó la Casa Blanca de 1993 a 2001, para una importante velada de recaudación de fondos.
El primer presidente negro de la historia de Estados Unidos y Biden se hallan en un “bromance” (acrónimo de las palabras brother, hermano, y romance).
Cuando Barack Obama era presidente establecieron una estrecha relación de trabajo.
Su complicidad, muy mediatizada, no tuvo precedentes.
La relación entre el presidente y el vicepresidente, un cargo bastante ingrato, “suele ser bastante tensa”, recalca Thomas Whalen, profesor de la Universidad de Boston.
“Mi hermano”
El experto cree que las pocas tensiones que existen o pudieron haber existido entre Obama y Biden son “una nimiedad”.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, aseguró recientemente: “Están muy unidos. Son de la misma familia. Se hablan regularmente”.
El vínculo entre los dos hombres también se fortaleció durante un período doloroso en la vida de Joe Biden.
Barack Obama se ofreció a ayudar económicamente al hijo mayor de su vicepresidente, Beau Biden, cuando éste luchaba contra un cáncer cerebral del que murió en 2015.
Durante el funeral, Barack Obama pronunció un largo elogio, dirigido tanto al difunto como a su padre, devastado por el dolor. “Joe, eres mi hermano”, dijo.
La prensa estadounidense, sin embargo, afirma que la relación es más compleja de lo que parece entre un presidente impopular y en plena campaña, y su carismático predecesor.
El propio Joe Biden alimentó los chismes políticos.
En una entrevista con un fiscal especial que investigó la forma en la que gestionó los registros oficiales, Biden habló sobre la desafortunada campaña de 2016 de la demócrata Hillary Clinton contra el republicano Donald Trump.
“Había mucha gente (…) en ese momento que me animaba a presentarme, pero no el presidente (Obama). No lo digo de forma malintencionada. Él pensó que ella tenía más posibilidades de ganar que yo”, dijo el demócrata, según la transcripción oficial.
Un comentario que sugiere una cierta amargura.
Apoyo y críticas
En 2013, Barack Obama tuvo que defender públicamente a su vicepresidente, tras la publicación de un libro que aseguraba que su equipo barajó la posibilidad de elegir a otro compañero de fórmula antes del segundo mandato.
En abril de 2022, durante una visita a la Casa Blanca, Obama le llamó de broma “vicepresidente”.
Biden, criticado por su edad, contará con el talento de orador y la popularidad de Obama durante su campaña de reelección.
Su entorno estima que es una retribución justa porque se ha desestimado, dice, el papel de Biden en la campaña de Obama de 2008, por ejemplo entre el electorado obrero del estado clave de Ohio o con su asesoramiento sobre el Congreso y la política exterior.
Los defensores del actual inquilino de la Casa Blanca están algo molestos con las críticas de los partidarios de Obama a la estrategia electoral del candidato demócrata.
Según el Washington Post, el expresidente manifestó directamente su preocupación durante un almuerzo en la Casa Blanca.
El gran artífice de las victoriosas campañas de Barack Obama en 2008 y 2012, David Axelrod, también hizo declaraciones pesimistas sobre las posibilidades de Joe Biden dada su edad y sus malas encuestas, lo que le habría valido en privado la calificación de “imbécil” por parte del actual presidente, según el sitio web Politico.