Un colectivo feminista de El Salvador denunció este viernes casos de “ataques” y “discriminación” a personas de la comunidad LGTBIQ+ tras la decisión del gobierno de Nayib Bukele de eliminar el enfoque de género de los programas escolares.
En “algunas” instituciones educativas se “está discriminando” a estudiantes por su identidad de género y se “les está exigiendo un comportamiento ‘normal'”, declaró Aranza Santos, de la Asamblea Feminista, en rueda de prensa.
“No tenemos espacio para dialogar con el gobierno, para buscar un acuerdo para que paren las vulneraciones y ataques”, agregó Santos, sin precisar el tipo de agresiones ni la cantidad de casos registrados.
A finales de febrero el Ministerio de Educación anunció que había retirado “todo rastro” de la perspectiva de género de los contenidos escolares, decisión que fue criticada por organismos de derechos humanos pero aplaudida por grupos conservadores.
“Estamos teniendo ya las primeras denuncias de estos casos de vulneraciones de compañeras trans a nivel educativo”, expresó Santos, cuyo colectivo congrega a varias organizaciones de mujeres y de la comunidad LGTBIQ+.
La activista Arlette Rivera dijo en la misma rueda de prensa que la decisión del gobierno de Bukele está “provocando intolerancia” en el país.
“El discurso de odio contra la comunidad LGTBI está ahí, creciendo, y esa intolerancia es porque el gobierno quiere invisibilizar a la comunidad”, sostuvo Rivera.
El ministerio hizo el anuncio días después de que Bukele participara en un encuentro conservador en Estados Unidos, al que asistieron también el mandatario ultraliberal argentino Javier Milei y el expresidente Donald Trump, candidato republicano a la Casa Blanca en las elecciones de noviembre.
“Aclaramos que todos estos contenidos han sido expulsados de guías, libros y demás materiales educativos que fueron hechos y difundidos por gestiones anteriores”, dijo el ministerio al informar la medida en la red X.
Cuando era candidato presidencial en 2019, Bukele se mostró abierto a discutir las demandas de la comunidad LGTBIQ+ y organizaciones feministas, pero en la presidencia dejó claro que no haría reformas en temas que son muy sensibles en un país muy conservador, que tiene leyes draconianas contra el aborto.
Bukele fue reelegido el 4 de febrero para un nuevo mandato de cinco años con el 85% de los votos gracias a la “guerra” contra las pandillas que lanzó hace dos años, que ha devuelto la paz a las calles de El Salvador.