Intrigas vaticanas: publican un documento anónimo que enumera los “defectos” del Papa y plantea su sucesión

Intrigas vaticanas: publican un documento anónimo que enumera los “defectos” del Papa y plantea su sucesión

Los buitres siempre revolotean sobre el Vaticano, sobre todo cuando hay noticias de un Papa que no se siente bien, enfermo. Justo cuando Francisco retomó este jueves sus audiencias tras haberse recuperado de una gripe que lo obligó ayer a ir a hacerse un chequeo al hospital y a suspender audiencias el sábado y el lunes pasado, volvieron a irrumpir en el escenario los buitres. Es decir, esa oposición ultraconservadora desde siempre -desde el inicio del pontificado, hace casi once años- hostil a este pontífice reformista, para ellos demasiado informal, con una visión de Iglesia abierta a todos, similar a un hospital de campaña que cura a los heridos.

Fue así que el sitio de La bussola quotidiana(La brújula cotidiana), conocido por sus ataques a Jorge Bergoglio, publicó en exclusiva y en seis idiomas un documento anónimo “destinado a circular entre los cardenales con vistas al próximo cónclave”, que traza el “identikit del próximo Papa”. El panfleto está firmado por “Demos II” y justo sale a dos años de otro similar que llevaba como firma “Demos”, pseudónimo que correspondía nada menos que al cardenal australiano George Pell, punta de lanza de la oposición conservadora a Francisco que, con su fallecimiento en enero del año pasado, quedó huérfana y desorientada.

“El autor principal es un cardenal que ha recogido las sugerencias de otros cardenales y obispos que desean permanecer en el anonimato”, advierte La bussola quotidiana.

El pasquín, que define las siete prioridades del próximo cónclave, reconoce que “está claro que los puntos fuertes del pontificado del papa Francisco son su insistencia en la compasión hacia los débiles, el acercamiento a los pobres y marginados, la preocupación por la dignidad de la creación y las cuestiones medioambientales que se derivan de ella, y los esfuerzos por acompañar a los que sufren y están alienados en sus cargas”.

Pero, a través de siete puntos temáticos, destaca que “sus defectos son igualmente obvios: un estilo de gobierno autocrático, a veces llegando a parecer vengativo; un descuido en cuestiones de derecho; intolerancia incluso frente al desacuerdo respetuoso; y -lo que es más grave- un estilo persistente de ambigüedad en cuestiones de fe y moral que causa confusión entre los fieles”. “La confusión genera división y conflicto. Mina la confianza en la Palabra de Dios. Debilita el testimonio evangélico. El resultado de esto es una Iglesia más fracturada que en ningún otro momento de su historia reciente”, advierte.

“La tarea del próximo pontificado debe ser, por tanto, la de recuperar y restablecer verdades que se han ido lentamente oscureciendo o perdiendo entre muchos cristianos”, plantea, al destacar que éstas incluyen, pero no se limitan, a aspectos “básicos”, como por ejemplo que “Dios es misericordioso pero también justo, y está íntimamente interesado en cada vida humana, Él perdona pero también nos pide cuentas, Él es a la vez Salvador y Juez”.

El papa Francisco suele repetir desde su elección que todos somos pecadores y que Dios es amor y que perdona a todos, siempre.

Los autores del libelo, que tienen una visión de la realidad en blanco y negro, aseguran luego que, si bien “el Papa es el sucesor de Pedro y quien garantiza la unidad de la Iglesia, no es un autócrata y no puede cambiar la doctrina de la Iglesia”.

Ataques

En los últimos meses los detractores de Francisco lo atacaron por el documento “Fiducia supplicans” -curiosamente no citado en el pasquín-, que permite que las parejas irregulares (divorciados vueltos a casar) u homosexuales puedan recibir una bendición pastoral espontánea, siempre y cuando este gesto no se asemeje a un matrimonio. Los opositores denunciaron al Papa por un cambio de doctrina, aunque este documento indica claramente que no hay ningún cambio ya que sigue vigente la tradicional doctrina sobre matrimonio.

El texto ataca luego a Francisco por su ambigüedad, que “no es evangélica ni acogedora”, sino que más bien “engendra dudas y alimenta impulsos cismáticos”. “Desde el principio, el pontificado actual se ha resistido a la fuerza evangélica y a la claridad intelectual de sus predecesores inmediatos. El desmantelamiento y reutilización del Instituto Juan Pablo II de Roma y la marginación de textos como Veritatis Splendor sugieren una elevación de la ‘compasión’ y la emoción a expensas de la razón, la justicia y la verdad. Para una comunidad de fe, esto es insano y profundamente peligroso”, denuncia.

También critican al Papa por su “excesiva confianza en el motu proprio como herramienta de gobierno y una despreocupación general y aversión por los detalles canónicos”. “Una vez más, como ocurre con la ambigüedad de la doctrina, el desprecio por el derecho canónico y el procedimiento canónico adecuado socava la confianza en la pureza de la misión de la Iglesia”, disparan.

Además, tras recordar que la Iglesia es “madre y maestra” de la humanidad, como describió Juan XXIII, acusan a Francisco por su apertura a homosexuales y colectivos LGTB. La Iglesia “nunca puede ser reducida a un sistema flexible de ética o a un análisis y remodelación sociológica para adaptarla a los instintos y apetitos (y confusiones sexuales) de una época. Uno de los principales defectos del actual pontificado es su alejamiento de una “teología del cuerpo” convincente y su falta de una atractiva antropología cristiana… precisamente en un momento en que aumentan los ataques a la naturaleza y la identidad humanas, desde el transgenerismo al transhumanismo”.

El panfleto critica por otro lado al Papa por viajar demasiado por el mundo, algo que sirvió en tiempos de Juan Pablo II, pero -según el auto anónimo- no ahora. “Los tiempos y las circunstancias han cambiado. La Iglesia en Italia y en toda Europa -el hogar histórico de la fe- está en crisis. El propio Vaticano necesita urgentemente una renovación de su moral, una limpieza de sus instituciones, procedimientos y personal, y una profunda reforma de sus finanzas para prepararse para un futuro más difícil. No son cosas pequeñas. Exigen la presencia, la atención directa y el compromiso personal de cualquier nuevo Papa”, afirma.

Se trata de un párrafo más que extraño porque desde el principio de su pontificado Francisco puso en marcha una reforma de la curia romana tendiente justamente a hacer limpieza en las finanzas vaticanas y a ponerle fin al nepotismo y la corrupción que allí se anidaban.

En el séptimo y último punto, el libelo se muestra preocupado por el actual colegio cardenalicio, mucho internacional que en otros tiempos, en el que la gran mayoría (73%) de los cardenales electores (menores de 80 años) fueron designados por Francisco. “Muchos de los electores que voten en el próximo cónclave no se conocerán realmente entre sí, y por tanto pueden ser más vulnerables a la manipulación”, alerta el documento, que considera que los purpurados deberían “activarse” para conocerse mejor y “para entender mejor las diferentes visiones que cada uno tiene de la Iglesia, las situaciones de sus Iglesias locales y la personalidad de cada cardenal –factores todos importantes para reflexionar sobre el nuevo Papa”.

Al final, el texto explica que es anónimo por temor a represalias. Denuncia la existencia de un clima de terror en el Vaticano, en el que “la sinceridad no es bienvenida y sus consecuencias pueden ser incómodas”. Y termina diciendo que tendría muchas más cosas para reflexionar y criticar, “señalando especialmente la fuerte dependencia del actual pontificado en la Compañía de Jesús”; “la reciente problemática actuación” del cardenal Víctor Manuel ‘Tucho’ Fernández, prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe”; y “el surgimiento de una pequeña oligarquía de confidentes con excesiva influencia dentro del Vaticano – todo ello a pesar de las pretensiones descentralizadoras de la sinodalidad, entre otras cosas”.