El expresidente de Estados Unidos Donald Trump acudió este lunes a un tribunal federal en el estado de Florida para asistir a una audiencia a puerta cerrada en el caso de mala gestión de documentos gubernamentales de alto secreto.
La jueza del caso, Aileen Cannon, convocó a la defensa del exmandatario (2017-2021) y a los integrantes de la Fiscalía para abordar cómo se iba a tratar el acceso a pruebas clasificadas en el caso.
Trump y su comitiva llegaron por la mañana al tribunal de Fort Pierce, unos 200 km al norte de Miami (sureste), donde los esperaba un grupo de seguidores con pancartas de apoyo de cara a su campaña para disputar las elecciones de noviembre. El político republicano, de 77 años, abandonó las instalaciones judiciales poco después de las 14H00 (19H00 GMT).
El año pasado, Trump se declaró no culpable de retener ilegalmente documentos clasificados en su residencia floridana de Mar-a-Lago y de obstaculizar los esfuerzos del FBI por recuperarlos.
Para preparar el caso, sus abogados quieren obtener acceso a pruebas clasificadas en poder de la Fiscalía, algo a lo que se opone esta última, alegando que son material demasiado sensible.
“Los abogados defensores deberán estar preparados para discutir sus teorías de defensa del caso, en detalle, y cómo cualquier información clasificada podría ser relevante o útil para la defensa”, escribió Cannon en el documento judicial en el que convocó la audiencia.
La jueza escuchó los argumentos de la defensa hasta primera hora de la tarde, antes de recibir a la Fiscalía, también a puerta cerrada.
El inicio de este juicio está previsto para el 20 de mayo. Junto a Trump, se sentarán en el banquillo de los acusados el administrador del complejo Mar-a-Lago, Carlos de Oliveira, y el ayudante personal del expresidente, Waltine Nauta.
En las últimas semanas, Trump compareció en audiencias de varios de los casos abiertos en su contra.
Sus problemas judiciales no parecen frenar de momento su aspiración de volver a la Casa Blanca con un triunfo en las presidenciales de noviembre. Al contrario, Trump es el gran favorito para encabezar a los republicanos en esos comicios.