Tres policías comparecen este martes ante la justicia en Francia por una grave agresión que provocó lesiones rectales a un joven negro durante un control en 2017, un caso de presunta violencia policial que conmocionó al país.
Casi siete años después de la agresión en Aulnay-sous-Bois, al noreste de París, Théodore Luhaka, de 28 años, presenta secuelas irreversibles por una herida en el ano provocada por una porra extensible.
Vestido con una chaqueta azul, Luhaka asistió al juicio ante un tribunal penal de Bobigny, al noreste de París, contra tres policías, acompañado de su familia y del presidente de la oenegé SOS Racisme, Dominique Sopo.
Marc-Antoine Castelain, de 34 años, Jeremie Dulin, de 42 años, y Tony Hochart, de 31, comparecieron en el banquillo de los acusados, en este proceso poco común sobre presunta violencia policial.
El 2 de febrero de 2017, cuatro agentes de policía decidieron someter a un control de identidad a un grupo de jóvenes en una barriada pobre.
Cuando el joven estaba de espaldas contra la pared, Castelain le asestó un duro golpe con su porra extensible que le provocó una rotura del esfínter.
Aunque en un primer momento se le trasladó detenido a comisaría, fue transportado al hospital para someterlo a una operación de emergencia por el fuerte sangrado anal.
Las cámaras de videovigilancia permitieron revelar los hechos y las imágenes divulgadas en redes sociales sacudieron incluso al entonces presidente francés, François Hollande, que visitó a la víctima en el hospital.
Castelain está acusado de violencia voluntaria que provocó una “incapacidad permanente” y se enfrenta a 15 años de prisión, aunque en un primer momento se le imputó por violación.
“El golpe que utilicé y provocó esta herida me lo enseñaron en la escuela [policial], es un golpe legítimo”, se justificó ante el tribunal.
Sus dos compañeros son juzgados por participar en la agresión e incluso por supuestamente arrodillarse y golpear a Luhaka, mientras estaba esposado en el suelo.
Una de las claves del proceso es determinar si hubo un uso desproporcionado de la fuerza, como concluyó una investigación de los asuntos internos de la policía.
El veredicto se espera el 19 de enero.
Las autoridades enfrentan regularmente denuncias de violencia policial.
La muerte en junio de 2023 de Nahel, un joven de 17 años, por el disparo de un agente durante un control de tráfico al oeste de París provocó varios días de disturbios urbanos.
© Agence France-Presse