Estados Unidos seguirá expulsando a los migrantes que incumplan las condiciones para entrar y quedarse en el país aunque se producirá un cierre parcial del gobierno este fin de semana, advirtió este viernes un funcionario estadounidense que pidió el anonimato.
Las leyes migratorias “no han cambiado, hemos fortalecido las consecuencias para las personas que cruzan de manera ilegal y estamos repatriando un número récord de personas desde el 12 de mayo a sus países ya México”, afirmó la fuente durante una rueda de prensa telefónica.
“Esto seguirá siendo cierto independientemente de lo que pase en el Congreso”, que tiene hasta la medianoche del sábado para ponerse de acuerdo sobre una ley que prolongue el presupuesto federal y evitar una parálisis de servicios.
Salvo un acuerdo de último minuto, algo altamente improbable, un millón y medio de funcionarios de la primera economía del mundo quedarán sin salario, el tráfico aéreo sufrirá trastornos y los parques nacionales cerrarán.
La aplicación de teléfono móvil (CBP One) a través de la cual los migrantes que se hallan en el centro y norte de México pueden solicitar ima cita para entrar en Estados Unidos “va a seguir operando”, más allá de lo que ocurra el fin de semana, aseguró el funcionario.
Esta aplicación es una de las vías implementadas por el gobierno del presidente demócrata Joe Biden para frenar la entrada de migrantes desde el 12 de mayo, cuando se levantó una norma sanitaria que en la práctica permitía bloquear a la mayoría de los que llegaban sin visa.
“La frontera no está abierta y no estará abierta a la inmigración irregular”, insistió el funcionario, quien advierte a los migrantes que los traficantes de personas (coyotes) dicen lo contrario para engañarlos.