La Guardia Civil española detuvo a cuatro personas por el intento de asesinato de un empresario de la localidad de Puzol, en Valencia. Los delincuentes, todos de nacionalidad colombiana, pertenecían a una banda de sicarios asentados en las provincias de Girona y Valencia, informó este lunes el Ministerio del Interior en una nota de prensa.
Se trata de tres hombres y una mujer. Fueron capturados como resultado del allanamiento a varios domicilios en las localidades de Figueres y Sollana, donde se recuperaron dos armas cortas de fuego con munición (una de ellas con silenciador), así como la dirección y el teléfono de la empresa de la víctima y la motocicleta empleada en el crimen.
Los hechos se remontan al pasado diciembre, cuando el empresario en cuestión llegaba a su sitio de trabajo en su coche. En el instante en que abría la puerta para bajarse, aparecieron dos personas en una motocicleta y le apuntaron con un arma de fuego. Un primer disparo “no llegó a alcanzarle en la cabeza por escasos centímetros”. Antes de que intentaran tirotearlo de nuevo, aceleró su vehículo y logró huir.
Tras una inspección al lugar de los hechos, la Guardia Civil encontró un casquillo y se dio comienzo a una investigación. Los agentes identificaron la motocicleta de los sospechosos y descubrieron que, en los tres meses anteriores al intento de asesinato, habían estado vigilando a su objetivo y el entorno para llevar a cabo el crimen, por el cual planeaban cobrar unos 32.000 dólares. De ese monto, ya habían recibido la mitad como adelanto.
Los criminales decidieron llevar a cabo un nuevo intento de atentado para concretar el encargo en los meses siguientes, pero las autoridades lograron detener al grupo y desarticularlo “por completo”. Los tres hombres arrestados fueron encarcelados y acusados de asesinato en grado de tentativa, pertenencia a grupo criminal y tenencia ilícita de armas. La mujer detenida, que recibió cargos por pertenencia a grupo criminal y tenencia ilícita de armas, se encuentra en libertad bajo medidas cautelares.
