Ha pasado casi un mes del asesinato de Edwin Arrieta a manos de Daniel Sancho y muchos interrogantes siguen abiertos. Si bien parecía un caso fácil de resolver dado que el joven español confesó a las autoridades lo que había hecho, lo cierto es que la Royal Thai Police sigue trabajando para descifrar la cronología de los acontecimientos y el móvil que podría haber llevado al hijo de Rodolfo Sancho a cometer dicho crimen.
Aunque todavía se desconocen estas motivaciones, lo que ha quedado claro es que el cirujano era un hombre muy generoso. No solo con Sancho, a quien ingresaba 25.000 euros mensuales en una cuenta que tenían en común, también con su familia. Precisamente por eso ha sorprendido tanto su herencia, pues aunque llevaba un alto nivel de vida, el colombiano no ha dejado propiedades ni tampoco una gran fortuna.
Así lo ha desvelado el diario El Mundo en un reportaje en el que se desmonta la creencia de que el médico tenía mucho dinero. Los que parecían ser sus dos grandes bastiones y orgullo, la clínica en la que trabajaba y operaba y el piso en el que residía de manera habitual, ambos ubicados en la ciudad de Montería, eran de alquiler.
Y cada vez que viajaba a una ciudad, ya fuera a Chile, donde también ejercía, o a Madrid, se alojaba en hoteles de lujo. Un síntoma que da a entender que tenía una economía saneada y que contrasta con el contenido de su herencia, pues según el citado medio los únicos bienes materiales que poseía eran un Mercedes y unos adornos de plata.
Edwin Arrieta solo tuvo un inmueble a su nombre, un chalet en playa de Córdoba, en Colombia, que terminó vendiendo para comprarle un piso a su hermana. “Tenía programado que más adelante, cuando tuviera la plata, le compraría una finquita a su padre”, asegura a su vez una persona de su entorno.
Altos ingresos
Al no haber invertido sus ingresos en inmuebles u objetos de valor, Edwin llevaba un alto nivel de vida que le permitía vivir cómo quería. En sus redes sociales, que todavía están abiertas, se puede ver que le gustaba jugar al polo, acudir a restaurantes de lujo y realizar viajes.
Tras la muerte del cirujano, y pese a haber hecho algunas declaraciones, la familia Arrieta ha optado por guardar silencio y dejar trabajar a las autoridades. “Va a haber una pausa en las declaraciones por parte de la familia. Vamos a hablar más desde el punto de vista jurídico, procesal”, desveló hace unos días su portavoz en España, Luis Romero.
Información sustraída de INFOBAE.