El presidente ruso, Vladimir Putin, destacó el jueves la “contribución” en Ucrania del jefe de la milicia Wagner, Yevgueni Prigozhin, quien se rebeló contra el Kremlin a finales de junio, y prometió investigar “a fondo” su muerte en un avión que se estrelló el miércoles cerca de Moscú.
Prigozhin era “un hombre con un destino complicado, que cometió graves errores en su vida, pero que obtuvo los resultados que se proponía”, afirmó Putin en una intervención transmitida por televisión, en la que también presentó su “sincero pésame” a los familiares. de las víctimas del siniestro aéreo.
En el vuelo viajaban otras nueve personas, entre tripulación y pasajeros, y ninguna sobrevivió.
La declaración de Putin, que calificó lo ocurrido de “tragedia”, fue la primera confirmación oficial de que el jefe de Wagner habría muerto.
El siniestro se produjo exactamente dos meses después del alzamiento en armas fallido de Prigozhin contra el Estado Mayor ruso, alentando las especulaciones de un eventual asesinato orquestado por el Kremlin.
Las autoridades rusas abrieron el jueves una investigación sobre las causas del accidente aludiendo a una “violación de las reglas de seguridad del transporte aéreo”, pero no evocó ninguna pista en particular.
Tribunal “alternativo”
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, aseguró este jueves que su país no tiene “nada que ver” con la muerte del jefe de Wagner.
“Hay un tribunal en La Haya, hay un tribunal ante Dios. Pero Rusia tiene un (tribunal) alternativo: el presidente Putin”, dijo cuando se le preguntó nuevamente sobre el accidente aéreo más tarde el jueves.
Entre los presuntos fallecidos también se encontrarían Dmitri Utkin, mano derecha de Prigozhin y comandante operativo de Wagner, y Valeri Chekalov, responsable logístico del grupo, según los medios rusos
En la localidad de Kujenkino, cerca de la cual se estrelló el aparato, un habitante, Vitali, dijo haber “escuchado un ‘bum'”. “Miré hacia arriba y vi un avión, con humo blanco por encima”, dijo en un vídeo difundido por el medio Fontanka.
En redes sociales, varias cuentas próximas a Wagner -que no tiene presencia oficial en línea- mencionaban el miércoles por la noche la hipótesis de un disparo de misil tierra-aire para explicar lo ocurrido.
Pero el Pentágono considera que no dispone “de información alguna que deje pensar que haya sido un misil tierra-aire” lo que causó la caída del avión, declaró a la prensa el jueves el portavoz del Departamento de Defensa estadounidense, Pat Ryder.
El miércoles por la noche, varias personas se concentraron delante de la sede de Wagner en San Petersburgo, y colocaron claveles rojos, velas y emblemas del grupo, con una calavera, frente al edificio.
En Ucrania, donde Wagner combatió durante mucho tiempo, hubo quien se alegró por el supuesto deceso.
“Quizás esto dé un impulso a acontecimientos desestabilizadores” en Rusia, afirmó Iryna Kushina, una funcionaria pública entrevistada por la AFP en Kiev.
Dudas razonables
En el extranjero, varios altos funcionarios dieron a entender que la muerte de Prigozhin podría haber sido urdida por el Kremlin.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, consideró el miércoles que “en Rusia suceden pocas cosas sin que Putin tenga algo que ver”.
La ministra francesa de Exteriores, Catherine Colonna, ironizó sobre las causas de la muerte del líder de Wagner, señalando que “la tasa de mortalidad entre las personas cercanas a Putin es particularmente elevada”.
“No es una coincidencia que todas las miradas se dirijan hacia el Kremlin cuando un excercano a Putin, caído en desgracia, cae literal y súbitamente del cielo dos meses después de haberse rebelado”, declaró la jefe de la diplomacia alemana, Annalena Baerbock.
El 24 de junio, Prigozhin llevó a cabo una sublevación contra el Estado Mayor ruso y el ministro de Defensa, Serguéi Shoigú, apoderándose de cuarteles del sur de Rusia y emprendiendo una marcha con tropas y blindados hacia Moscú.
Durante el levantamiento, Putin no ocultó su ira y acusó a su exaliado de “traición”.
Pero la rebelión se interrumpió ese mismo día, tras un acuerdo que preveía que Prigozhin partiera a Bielorrusia y que los milicianos de Wagner se incorporaran al Ejército regular ruso.
Aun así, el jefe de Wagner continuó visitando Rusia, incluso el Kremlin.
El lunes por la noche, Prigozhin, de 62 años, había aparecido en un vídeo difundido por grupos cercanos a Wagner en el que decía estar en África para hacer una “Rusia aún más grande” con presencia en otros dominios.